Carlos Mouriño ha vuelto a la palestra mediática. El presidente del Celta comparecía sobre las 12:30 horas. Ha mostrado su enfado. Recuperó las frases de aquella campaña mediática que hizo y que dividió al celtismo. "Dije que nos querían echar de Vigo y lo mantengo", afirmaba el máximo mandatorio del club vigués.
El presidente del Celta se dirigió directamente al alcalde de Vigo después de repetir la retórica que le llevó hace meses a diferentes escenarios de la ciudad olívica como el Auditorio Mar de Vigo o el Círculo de Empresarios de Vigo. "Alcalde, no me sometes", aseveraba Carlos Mouriño tras casi media hora sin dar nombres.
"¿Saben por qué estamos en Mos? Porque Vigo no tiene Plan Xeral". El presidente del Celta incluso comentaba más adelante que la ausencia de este plan urbanístico en la ciudad olívica se debe "a la incapacidad de alguien". El presidente del Celta tiraba de indirectas de nuevo.
Las amenazas fueron las protagonistas de esta comparecencia de Carlos Mouriño. "No firmaré la concesión si el Ayuntamiento se entromete en la ciudad deportiva de Mos". El máximo mandatario del club vigués acusó al Concello de no respetar un pacto, un acuerdo entre el club vigués, el Concello y la Xunta en el que Mouriño recuerda que se visibilizó en un acto en el Hotel Los Escudos, un acto cerrado a la masa social del celtismo y a los medios de comunicación.
Durante la comparecencia desveló los detalles de la concesión de Balaídos, que sería de 880.000 euros anuales por un período de 50 años. "El Celta tendría que pagar 40 millones de euros", comentaba un Carlos Mouriño visiblemente cabreado.El presidente del Celta volvió a dejar en el aire esa advertencia de que el conjunto vigués se vaya de Vigo. Además, aseveró que las relaciones entre las dos instituciones están 'tocadas'. "No sé si están rotas, pero lógicamente sí están dañadas", aseguraba el máximo accionista del club celeste.
Carlos Mouriño también calificó de "poco creíbles" las soluciones que le aporta el Concello de Vigo al considerar que "es mezclar política con deporte". El presidente de la entidad deportiva censuró que se den permisos a otras empresas a hacer centros comerciales en la ciudad y no al Celta. El empresario admitió que el club le debe mucho a la urbe gallega pero no al alcalde.