Celta - Granada: el fútbol no morirá jamás mientras exista Iago Aspas

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En una semana marcada por la muerte de Diego Armando Maradona, Iago Aspas realizó una actuación magistral. De "MVP" no solo de su equipo, sino de Primera División. El moañés no marcó, pero fue protagonista en los tres tantos que permitieron al cuadro celeste remontar el tanto inicial de Luis Suárez y firmar un triunfo vital para reconducir el rumbo en Primera División.

Iago Aspas demostró muchas cosas sobre el verde de Balaídos. Ni el fútbol se ha muerto con Maradona ni tiene sentido retirar el dorsal 10 de todos los equipos de fútbol como propuso Villas-Boas. El "Príncipe de las Bateas", el astro del fútbol humilde, también es el Diez. Su enésima obra de arte sirvió para guiar al equipo vigués a la primera victoria de la era del "Chacho" Coudet.

Lo de Aspas ha sido una exhibición. La Liga lo califica en sus redes sociales de "escándalo". Sin embargo, más allá del partidazo del moañés, el Celta volvió a consolidar su mejoría en el juego. Ya se vio ante el Elche, frente al Sevilla y se constató esta tarde en Balaídos. Entre medias ha habido cambio de técnico. El "Chacho" Coudet no es "Escuela Barça" como Óscar García, pero también apuesta por un fútbol valiente. Esa valentía va acompañada de una intensidad de la que adolecía el cuadro celeste en estas dos últimas temporadas.

Ante el Granada el Celta cuajó una primera media hora sobresaliente. El "Chacho" Coudet" fue el primero en dar ejemplo. Once valiente para que su equipo también se atreviera, diera la cara ante un adversario exigente. Denis Suárez y Brais Méndez como creadores y un Iago Aspas con libertad de movimientos en la zona de tres cuartos para derrumbar la muralla andaluza. La idea del preparador argentino surtía efecto. Su plan era perfecto. Fallaban los hombres. La enésima muestra de que el conjunto vigués necesitaba con urgencia incoporar un delantero centro el pasado verano. Santi Mina y Nolito tenían las ocasiones más claras para batir a un Rui Silva que solo en la primera mitad firmaba cuatro intervenciones de mérito.

La lección más dura que encaja este Celta en estos últimos tiempos es que el fútbol es un juego de áreas. Puedes hacer buen fútbol, pero sí no estás acertado en los metros iniciales y en los finales estás condenado. Y este equipo sufre tanto en defensa como en ataque. El Granada aprovechó un contragolpe para abrir el marcador. Luis Suárez ganó en carrera a Renato Tapia, que hacía la cobertura del "desaparecido" Jeison Murillo, y batió con un remate sutil y de sumo talento a Rubén Blanco.

Varapalo. Bofetón a las buenas intenciones futbolísticas del Celta. Sin embargo, el equipo del "Chacho" Coudet parece que tiene alma. La reacción fue instantánea. Iago Aspas recogió un balón a las espaldas del Yangel Herrera. Tuvo tiempo para pensar. Esperó la incorporación al ataque de Lucas Olaza, asistió al uruguayo y el "15" celeste sirvió un centro raso que encontró, al fin, el remate certero de Nolito al fondo de la red. El susto duró dos minutos. 120 segundos en el que el miedo se disipó.

El Celta supo dominar al rival. Llevar el tempo del encuentro. La intensidad era clara. De uno a dos toques y movilidad constante para intentar noquear al Granada. Los pupilos del vigués Diego Martínez apenas crearon peligro, aunque al filo del descanso Rubén Blanco evitó el tanto de los visitantes. El mosense respondía a su homólogo Rui Silva, que minutos antes sacó una gran mano a un buen disparo desde la frontal de Brais Méndez.

El equipo vigués se iba al descanso cuajando una buena actuación. Gran imagen. El Celta encontraba el camino para poner fin a una racha de ocho partidos sin ganar. Los del "Chacho" Coudet rebajaban la intensidad de la primera media hora de partido. Tocaba dosificar. Lo sucedido en el Sánchez Pizjuán tenía que servir de lección. Los vigueses seguían controlando el choque. El preparador celeste movía banquillo. Reforzaba la sala de máquinas dando entrada a Okay Yokuslu y a Miguel Baeza y retiraba a Nolito y Denis Suárez.

La apuesta le acabó por salir redonda. El partido llegará a su momento caliente. El tramo donde se esfumó el botín ante el Sevilla sirvió para certificar el triunfo frente al Granada. Iago Aspas culminó su lección futbolística viendo pases donde solo los ven los magos del balón. El moañés sirvió un balón al corazón del área buscando la llegada de Miguel Baeza. La jugada acabó en una carambola en la que Mina no pudo mandar el esférico a la jaula. Sí lo hizo Baeza, que celebró su primer tanto en Primera División.

Tocaba amarrar el resultado. El "Chacho" Coudet quitaba a Santi Mina para introducir a Fran Beltrán. Más arsenal para la medular. Curiosamente, el madrileño acabaría aprovechando una gran asistencia de Iago Aspas para sentenciar el choque. Victoria clave. Vital. De esas que pueden servir de punto de inflexión. El equipo vigués se aferra a la vida. Con Aspas siempre hay esperanza.

Ficha técnica del RC Celta - Granada

RC Celta: Rubén Blanco; Hugo Mallo, Araujo, Murillo, Lucas Olaza; Renato Tapia, Denis Suárez (Okay, 74'), Brais Méndez (Aidoo, 92'); Iago Aspas, Nolito (Miguel Baeza, 74') y Santi Mina (Fran Beltrán, 83').

Granada: Rui Silva; Foulquier (Quini, 76'), Vallejo (Soro, 83'), Germán, Domingos Duarte, Carlos Neva; Yangel Herrera (Gonalons, 60'), Luis Milla; Machis, Luis Suárez (Soldado, 60') y Jorge Molina (Puertas, 46').

Goles: 0-1: Luis Suárez (25'); 1-1: Nolito (27'); 2-1: Miguel Baeza (81'); 3-1: Fran Beltrán (85')

Árbitro: Díaz de Mera (comité castellano-manchego). Mostró tarjeta amarilla a Murillo, Renato Tapia, Lucas Olaza y Hugo Mallo por parte del Celta mientras que por parte del Granada vieron cartulina amarilla Foulquier, Puertas y Soldado. Expulsó a Okay Yokuslu (95') con roja directa.

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