Dos excélticos que dan lecciones a dos gigantes europeos

No ganaron, pero dejaron huella. Eduardo Berizzo y Roberto Lago forman parte de la élite del futbol europeo. Debutaron en la Champions League, la mejor competición de clubs del mundo, y lo hicieron sin miedos, dando lecciones en dos escenarios como Anfield Road y el Santiago Bernabéu.

El celtismo miraba con cariño el bautizo de Eduardo Berizzo en un campo que a finales de los 90 fue territorio del Celta que lideraba el Zar Mostovoi. El preparador argentino se fue con un buen resultado del feudo del Liverpool. Sin embargo, su protagonismo trasciende el empate a dos con el que acabó el choque. El extécnico celeste fue expulsado en el minuto 59 por no entregar un balón a un contrario. Quiso dar una lección a Jürgen Klopp, que había acusado al entrenador del Sevilla con perder tiempo en una acción similar en la primera parte cuando los andaluces ganaban. En el segundo acto hizo lo mismo cuandos su equipo iba perdiendo. "No soy un entrenador que no apele a nada que no tenga que ver con el juego que pretendo", afirmaba Eduardo "Toto" Berizzo a BeIn Sports.

El canterano del Celta, Roberto Lago, también fue protagonista por su enfrentamiento contra el Real Madrid. El defensor del APOEL de Nicosia cuajó una buena actuación a pesar de que su equipo cayó con contundencia ante el vigente campeón de la Champions League (3-0). El de O Calvario estuvo a punto de abrir el marcador con un remate desde fuera del área que Keylor Navas mandó a córner.

Ya en la segunda mitad, el colegiado sancionó una mano inexistente de Roberto Lago en el área visitante. Penalti injusto. Cristiano Ronaldo aprovechó el regalo y encarriló la derrota del conjunto del exjugador del Celta de Vigo. El exjugador del Celta comentaba la acción tras el partido para el micrófono de BeIn Sports. "Cristiano reía. Yo no me lo podía creer. El penalti lo pitó más el público que los jugadores", aseguraba el canterano.

En definitiva, un empate y una derrota. Ese fue el balance del primer día, de la primera vez de Eduardo Berizzo y Roberto Lago en la Champions League. Pero lo importante no fue el resultado, sino sus palabras, sus hechos ante dos leyendas del fútbol europeo como el Liverpool y el Real Madrid.