La borrasca Alex desembarcaba en Galicia al mismo tiempo que el Celta se proponía emular la enésima proeza ante el FC Barcelona. Balaídos se convertía en el último lustro en el templo de la pesadilla para los azulgrana. Su punto débil incluso en las temporadas más inmaculadas. Sin embargo, el conjunto vigués pronto sufrió a la ciclogénesis "Ansu Fati", posiblemente el jugador de moda en estos momentos en LaLiga. Los vigueses reaccionaron. Buscaron el empate, pero les faltó acierto en los metros finales para derribar de nuevo a un coloso del fútbol europeo.
El duelo ante el FC Barcelona es un golpe de realidad. Se podría decir que se impuso la lógica. El encuentro deja aspectos positivos. Siempre hay motivos para creer, para confiar, pero lo cierto es que el Celta necesita reforzar su plantilla para no pasar los apuros de las dos últimas temporadas. El equipo vigués es el conjunto de la "morriña". Añora a Maxi Gómez -necesita un delantero- y empieza a añorar a Rafinha Alcántara -urge ese jugador que dé el último pase-. Hasta el 5 de octubre hay tiempo para apuntalar el bloque de un Óscar García que sigue sin confiar en Álvaro Vadillo.
Esa falta de luz en la zona de tres cuartos marcó el partido. Óscar García apostó por un plan similar al del último encuentro ante los catalanes en Balaídos. Defensa de tres centrales y rotaciones. En el banquillo quedaban habituales como Nolito o Fran Beltrán. El de Sabadell sorprendía con su formación inicial. Fontán adelantaba en la rotación a Araújo mientras que Gabri Veiga se convertía en el acompañante de Renato Tapia en la sala de máquinas. Entre líneas el protagonismo sería para Denis Suárez, que volvió a estar lejos del nivel que se le presupone.
El gol de Ansu Fati era una bofetada a esas ansias de seguir siendo un "mata gigantes". Sin embargo, el Celta reaccionó. Se vio a un equipo que sabía tocar rápido. Agresivo. Móvil. El Barça sufría, pero las opciones de los vigueses se diluían en el balcón del área visitante. La exigencia a los de Ronald Koeman provocó que Lenglet viera la roja por doble amarilla al filo del descanso. El Celta se iba a los vestuarios ofreciendo una buena imagen, liderado por un Gabri Veiga que había dejado unas sensaciones inmejorables y tras sufrir la lesión de Fontán en la primera media hora de juego. Araújo era el encargado de ocupar su lugar sobre el césped.
Se abría una posibilidad para la sorpresa. Al menos para seguir sumando y mantener esa condición de invicto. Óscar García agitaba su pizarra. Regreso a la defensa de dos centrales, un ajuste que se traducía en el relevo de Aidoo por Miguel Baeza. La falta de intensidad del Celta supuso un paso casi definitivo a la lona. El Barça mostró sobre el mojado tapete de Balaídos lo que el Celta no tuvo esta noche: acierto y creatividad en los metros finales. Lionel Messi se plantó ante Iván Villar. Su remate, rechazado por Lucas Olaza, sorprendió al guardameta de Aldán y acabó en el fondo de la red.
Era el momento de arriesgar. Nolito y Santi Mina ingresaban por Emre Mor y Gabri Veiga. El Celta buscaba el camino hacia ese gol que le diera vida en el partido. Baeza tuvo la más clara del encuentro. Un remate del andaluz se fue al larguero. Nolito, uno de los más activos, también probó hasta en dos ocasiones a Neto, pero el brasileño desbarató los dos remates del sanluqueño.
Ya en el descuento, el Barça puso la sentencia al encuentro y el desenlace a su particular maleficio con Balaídos. Sergi Roberto cazó un rechace en el área para batir de bolea a Iván Villar. Era el cero a tres. Duro castigo para un Celta que fue incapaz de amenazar el triunfo de un Barça que jugó más de 45 minutos en inferioridad numérica. Este fin de semana, partido importante para olvidar la derrota y retomar la senda hacia una salvación sin apuros. Duelo frente a un rival directo como Osasuna en el siempre exigente El Sadar.
Ficha técnica del Celta - FC Barcelona
RC Celta: Iván Villar; Hugo Mallo, Aidoo (Baeza, 46'), Murillo, Fontán (Araújo, 32'), Lucas Olaza; Tapia (Fran Beltrán, 75'), Gabri Veiga (Nolito, 60'), Denis Suárez; Emre Mor (Santi Mina, 60') y Aspas.
FC Barcelona: Neto; Sergi Roberto, Piqué, Lenglet, Jordi Alba; Busquets, De Jong; Griezmann (Araujo, 45+1'), Coutinho (Pedri, 72'), Ansu Fati (Trincao, 72'); y Messi.
Goles: 0-1: Ansu Fati (11'); 1-1: Lucas Olaza (pp) (51'); 0-3: Sergi Roberto (90+3').
Árbitro: Del Cerro Grande (comité madrileño). Expulsó a Lenglet (42') por doble amarilla.