El Concello de Nigrán ha acordado con la Federación Galega de Surf un nuevo protocolo de seguridad para adaptar su práctica deportiva, concretamente a la enseñanza, a todos los requerimientos sanitarios provocados por el coronavirus. Este convenio afecta en el municipio a la playa de Patos, donde se concentran cinco escuelas de surf que, durante los meses de verano, suman el 90% del total de alumnos anuales.
"De lo que se trata con este protocolo es de garantizar la seguridad de los bañistas y de los surfistas de forma que las escuelas de surf puedan retomar su actividad en los meses más potentes del año para garantizar su supervivencia, ya que el cierre provocado por el COVID19 supuso un gran prejuicio económico para ellas", señala el alcalde Juan González. De esta forma, las escuelas retomarán las clases con menos alumnos y coordinándose entre ellas para que siempre se puedan mantener las distancias de seguridad.
Según la zonificación establecida de la playa para la práctica de surf por parte de las escuelas -ocupa cada una unos 100 metros lineales-, los alumnos se verán reducidos de 80 a 60 en una de las láminas y de 100 a 60 en la otra. Paralelamente, se señalizará mediante cuerdas un acceso de los surfistas al agua para que no haya interferencias con los bañistas en la entrada y salida. "Durante el año esto no es necesario, pero en el verano, máxime en esta situación, es lo más recomendable", afirma Juan González. "El surf es señal de identidad de Patos y un deporte individual sin contacto, por lo tanto, de bajo riesgo ante el COVID19, y ofrece evidentes beneficios físicos y psicológicos, por lo que creemos conveniente apostar por su continuidad", finaliza.