Europa sigue siendo un sueño para el Celta. El conjunto vigués volvió a ser un equipo irregular en su juego. Ha sucumbido al rigor táctico y al físico de un Leganés rocoso que ha aprovechado sus armas para certificar de forma virtual la salvación y alejar al cuadro celeste de la lucha por la sexta plaza. Un gol de Guerrero mediada la segunda parte dictó sentencia (1-0).
Sorprendió Unzué. Quiso dar continuidad al once que goleó al Sevilla. Maxi Gómez era suplente. El navarro mantenía su apuesta por Brais Méndez en la tripleta ofensiva a pierna cambiada mientras que Iago Aspas sería la referencia ofensiva. El Celta afrontaba otro partido llave por Europa. Se medía a un Leganés con bajas, "tocado" en ataque por las ausencias de Amrabat y Claudio Beauvue, cedido por el club vigués en la entidad madrileña.
El plan de Unzué no surtió efecto. El Celta nunca se sintió cómodo. Volvió a caer en la trampa que le proponen conjuntos como el Leganés, equipos rocosos, sólidos, casi perfectos tácticamente, que hurgan en la debilidad del adversario para tumbarlo. El cuadro celeste goza de la posesión, pero no sabe traducirla en ocasiones para trasladar esa superioridad al electrónico. Solo en la recta inicial del choque, el Celta dio muestras de poder derribar el cerrojo pepinero. Iago Aspas cabeceó un centro de Pione Sisto que acabó despejando Cuéllar. Era el minuto 12. Antes, Miguel Ángel Guerrero daba el primer aviso. Ganaba la espalda a la zaga celeste, aunque su disparo cruzado no encontraba la portería de Sergio Álvarez.
Primer acto igualado. El Leganés salía victorioso con su plan. Asfixiaba la elaboración del Celta desde atrás y neutralizaba el vendaval ofensivo de Iago Aspas y sus socios Pione Sisto y Brais Méndez. Unzué movía banquillo antes de comenzar el segundo período. Retiraba al mosense y daba entrada a Maxi Gómez. El uruguayo se antojaba la opción ideal para apostar por una salida en largo buscando el buen juego aéreo y de espaldas del internacional charrúa.
El Celta sucumbió al físico y a la táctica del Leganés. Los discípulos de Garitano priorizaban la finalización sobre la posesión. El balón no era importante, sino culminar las jugadas. El conjunto local hurgaba en el punto débil defensivo de los vigueses, exprimiendo al máximo las acciones a balón parado y los centros laterales. Los pepineros lograron la recompensa a su insistencia. Miguel Ángel Guerrero remataba de primeras un centro de El Zhar que se convertía en imposible para Sergio Álvarez. El Gato de Catoira ya había sacado dos buenas manos a dos remates de la escuadra madrileña.
Juan Carlos Unzué agitaba de nuevo el encuentro. Esta vez con doble cambio. Nemanja Radoja para reactivar una sala de máquinas que no carburó en Butarque y un Emre Mor para revolucionar los metros finales del ataque. Quedaban veinte minutos. El Leganés no jugaba ya tanto en campo contrario. El Celta recuperó el dominio. Llevó la iniciativa del encuentro, pero apenas creó trabajo a Iván Cuellar. Solo un saque largo de Sergio Álvarez, que peinó Aspas, permitió a Daniel Wass cazar un balón en el área visitante, pero su remate defectuoso lo atrapó sin problemas el guardameta local.
El conjunto vigués se exasperaba. No encontraba la llave de la puerta rival. El empate parecía una quimera, una utopía que se asemeja a ese sueño de poder disputar la próxima temporada competición europea. Esa desesperación se mostraba en un pique entre Hugo Mallo con Diego Rico. El marinense, que vio la amarilla por encararse con el zaguero pepinero, se perderá el siguiente encuentro ante el FC Barcelona, una ausencia que se suma a la de Tucu Hernández, que también cumplirá ciclo de amonestaciones.
Ficha técnica del Leganés - Celta:
Leganés: Cuéllar; Zaldúa, Unai Bustinza, Siovas, Diego Rico; Rubén Pérez, Gumbau (Dos Santos, 88'); El Zhar, Eraso (Darko, 80'), Omar Ramos; y Guerrero.
RC Celta: Sergio; Hugo Mallo, Cabral, Sergi Gómez, Jonny; Lobotka (Radoja, 70'), Wass, Tucu Hernández; Brais Méndez (Maxi Gómez, 46'), Pione Sisto (Emre Mor, 70') y Aspas.
Gol: 1-0: Guerrero (63').
Árbitro: Hernández Hernández (comité canario). Mostró tarjeta amarilla a Diego Rico, Gumbau e Iván Cuellar por el Leganés mientras que por parte del Celta vieron cartulina amarilla Tucu Hernández, Emre Mor y Hugo Mallo.