La mejor liga de baloncesto del mundo recuperará la actividad en la madrugada del jueves 22 al viernes 23 después del parón por el All-Star Game. La recta final de la temporada regular ya ha comenzado y en poco más de dos meses comenzarán los ansiados playoffs.
Tras más de cuatro meses de competición, la NBA comienza a definirse de cara a los playoffs. Las 30 franquicias ya se han marcado sus objetivos para lo que queda de temporada, y, después de un cierre de mercado realmente movido, encararán el tramo final de la temporada regular.
Conferencia Este
En las últimas semanas, el nombre propio de la liga son los Toronto Raptors. El pasado verano era difícil presagiar un curso baloncestístico como el que están completando los Raptors, cuando jugadores de roles importantes (sobre todo de la segunda unidad) abandonaron Canadá: Cory Joseph, PJ Tucker, Terrence Ross o Patrick Patterson. Sin embargo, el buen papel desempeñado por el primer entrenador, Dwane Case, la eficiencia de su pareja de estrellas (DeMar DeRozan y Kyle Lowry) y la regeneración de una segunda unidad que está funcionando a la perfección, son factores que se han conseguido conjugar para poder liderar la Conferencia Este.
Los Boston Celtics fueron la franquicia que cedió ese primer puesto. Los pupilos de Brad Stevens se mostraron irregulares en algunas fases de los que llevamos de competición, pero siguen siendo el principal rival que tiene Toronto para pelear por el liderato. A la confirmación de jugadores como Jaylen Brown y Jason Tatum se les ha sumado la aparición más que notable de Terry Rozier, que está completando un inicio de 2018 muy positivo para los intereses de los Celtics.
Descendiendo en la clasificación, la igualdad aumenta en la zona de playoffs. Los Cavaliers sufrieron una profunda crisis de resultados antes del trade deadline, lo que supuso una auténtica revolución en los despachos. Isaiah Thomas, Dwyane Wade, Iman Shumpert, Channing Frye, Derrick Rose y Jae Crowder salieron, mientras que llegaron Rodney Hood, George Hill, Jordan Clarkson y Larry Nance Jr. Por otro lado, los Wizards están teniendo que convivir con la lesión de John Wall, y los Bucks siguen involucrados en un periodo de transición desde la destitución de Jason Kidd (Jabari Parker regresó a las canchas tras un año sin poder competir).
Las otras cuatro franquicias que lucharán por un puesto en la postemporada son Heat, Pacers, Sixers y Pistons; veremos si los Hornets consiguen engancharse a ese grupo o finalmente caen a la zona baja. Si en Miami Spoelstra se sigue erigiendo como la figura esencial junto a un Goran Dragic, que ha sido seleccionado por primera vez para disputar el All-Star Game, en Indiana Victor Oladipo sigue completando el mejor año de su carrera profesional. Al mismo tiempo, en Philadelphia por fin pueden celebrar la participación de Joel Embiid en los back-to-back, mientras que Detroit aún se está adecuando al traspaso que envió a Avery Bradley y a Tobias Harris a Los Ángeles a cambio de Blake Griffin.
La parte baja de la conferencia, por el contrario, representa otra aspiración concreta: el draft. New York, Brooklyn, Orlando, Chicago y Atlanta ya tienen un ojo mirando a la próxima temporada al tiempo que intentan desarrollar a jugadores jóvenes para el futuro.
Como apunte extra, la estrella de los New York Knicks, Kristaps Porzingis, se rompió el ligamento cruzado de su rodilla izquierda, por lo que se perderá lo que resta de temporada, y Zach LaVine volvió a las canchas tras 11 meses de inactividad. A su vez, el jugador española Nikola Mirotic fue traspasado a New Orleans antes de la fecha límite del pasado ocho de febrero.
Conferencia Oeste
En la Conferencia Oeste hay prácticamente un empate técnico entre los Houston Rockets y los Golden State Warriors. Houston sigue mostrando credenciales para ser el principal candidato a hacerle frente a Golden State en su camino hacia el anillo. Chris Paul no ha necesitado ningún período de adaptación para rendir desde el primer momento junto a James Harden, y juntos se han convertido en el backcourt con mejores guarismos en cuanto a ‘victorias-derrotas’. El baloncesto que practica Houston sigue una línea continuista con respecto a temporadas pasadas, pero este año Mike D’Antoni se asegura tener a un generador de élite en cancha durante los 48 minutos de partido. Con las incorporaciones de Gerald Green, Joe Johnson y Brandn Wright parece que ahora sí los Rockets están preparados para dar un paso adelante necesario en los playoffs.
Los Warriors, por su parte, mantienen el favoritismo en las apuestas pese a estar firmando una temporada regular menos dominante que en años anteriores. Si bien sus cuatro All Star (Stephen Curry, Kevin Durant, Klay Thompson y Draymond Green) están a buen nivel, lo cierto es que están llegando algunas dudas en el lado defensivo. Nada preocupante si tenemos en cuenta que Golden State es un equipo con unos automatismos evidentes desde que Steven Kerr cogió el mando del equipo en 2014, pero tendrán que recurrir a ellos cuando llegue la fase importante de la temporada si no quieren dar alas a sus principales rivales de conferencia.
El pelotón del Oeste corresponde a las franquicias que van desde la tercera posición (San Antonio Spurs) hasta la décima (Utah Jazz), puesto que tan sólo hay cuatro partidos de diferencia entre ambos equipos. Los Spurs siguen con muchos problemas de lesiones, y, tras 59 encuentros disputados, Kawhi Leonard únicamente disputó nueve de ellos, a lo que se suma la baja de Rudy Gay desde finales del mes de diciembre. Del mismo modo, Minnesota y Oklahoma City también están sufriendo malos resultados en las últimas semanas (5-5 los primeros y 4-6 los segundos en los últimos 10 partidos) y han visto como la zona media de la conferencia se ha ido aproximando poco a poco. Denver, que está atravesando un momento de forma formidable y Portland, sustentado bajo el mandato de un gran Damian Lillard, ocupan las últimas posiciones que dan acceso a los playoffs junto a New Orleans Pelicans, que tendrán a DeMarcus Cousins fuera de las pistas el resto de temporada. Los Clippers y los Jazz (once victorias consecutivas en los últimos once partidos de competición para estos últimos) cerrarían el grupo de franquicias aspirantes a disputar la postemporada.
En la undécima posición, Los Ángeles Lakers son una isla en una conferencia claramente dividida en dos mitades. Los angelinos no están tan bien como para pelear por disputar las eliminatorias por el título a partir del mes de abril, pero tampoco forman parte de la zona baja de la clasificación. Su porcentaje de victorias (ligeramente superior al 40%) los pone por encima de Memphis, Sacramento, Dallas y Phoenix, con porcentajes que no superan el 32% en ninguno de los cuatro casos.