Susana Rodríguez Gacio confirma su conquista del mundo. La gloria paralímpica ya es suya al lograr el oro en Tokyo. Lo ha logrado, junto a su guía Sara Loehr, firmando una actuación histórica en el triatlón en clase PTVI (deportistas con discapacidad visual), donde ha dominado la prueba de principio a fin con una autoridad aplastante. Una carrera perfecta para lograr el mayor de los premios. La marca de 1:07.15 permitieron a la viguesa alcanzar su sueño de ganar una medalla en unos Juegos. En este caso, el premio gordo, la presea de oro, y sacando casi cuatro minutos a la segunda, la italiana Anna Barbaro y su guía Charlotte Bonin. El podio lo completó la francesa Annouck Curzillat y Celine Bousrez.
El oro en Tokyo 2020 confirma a Susana Rodríguez Gacio como una de las mejores deportistas viguesas de la historia. El campeonato paralímpico en Tokyo le permiten completar la triple corona al tener ya en su impresionante palmarés los campeonatos del mundo y de Europa.
"Es increíble la sensación que tienes en el podio. No se puede explicar con palabras", manifestaba Susana Rodríguez Gacio, feliz, tras dejar huella en estos Juegos Paralímpicos. No obstante, la viguesa debe esperar para celebrar esta medalla de oro por todo lo alto, ya que mañana tiene la sesión clasificatoria en la modalidad de los 1.500 metros.
La historia de Susana Rodríguez Gacio alcanzó impacto internacional al ser la portada de la revista Time por compaginar su labor como sanitaria, su profesión, con los exigentes entrenamientos para preparar la cita de los Juegos Paralímpicos de Tokyo 2020. Esa conciliación fue el eje del reportaje en la prestigiosa revista, un reportaje que fue el inicio de la leyenda que durante esta madrugada en Vigo ha terminado de forjarse.
En la información publicada en julio en Time, la viguesa explicaba que por la mañana trabajaba en el hospital mientras que por la tarde era el turno de construir el oro paralímpico que ahora ya figura entre sus conquistas. Susana Rodríguez Gacio consideraba esas exigentes sesiones preparatorias para Tokyo 2020 como una especie de terapia. "Creo que el deporte me ayudó a recuperarme y volver a enfrentarme al día siguiente al trabajo", expresaba a la revista estadounidense. Meses después esa terapia se ha convertido en oro. Una historia de superación con final feliz.