Un año más, las luces del deporte internacional enfocan a Estados Unidos para vivir una nueva temporada de la NBA. La mejor liga de baloncesto del mundo arranca este próximo martes y volverá a ser el gran atractivo de los aficionados al deporte de la canasta.
No hay nada más grande que una noche NBA. Tierra de gigantes en @movistarplus. #dormiresdecobardes pic.twitter.com/H7wQfHzCZp
— NBA en Movistar+ (@nbaplus) 13 outubro 2017
Mentiríamos si dijésemos que los Golden State Warriors no son los principales favoritos a revalidar el título de campeones. Después del anillo en junio de este mismo año, se presentaba un verano complicado en las oficinas de la franquicia californiana, pero podemos asegurar que el resultado ha sido magnífico para los intereses de los de la bahía. Después de la renovación de Stephen Curry y el sacrificio salarial de Kevin Durant, los Warriors consiguieron firmar a Andre Iguodala y a Shaun Livingston. La columna vertebral de Golden State, por lo tanto, seguirá intacta un año más. O lo que es lo mismo: los Warriors quieren seguir dominando el baloncesto norteamericano.
Al margen de los actuales campeones, el periodo estival posterior a las últimas finales fue muy movido en el mercado NBA. Grandes superestrellas de la liga cambiaron de equipo (Kyrie Irving aterrizó en Boston e Isaiah Thomas en Cleveland, mientras que Chris Paul cambió Los Ángeles por Houston), y otros se mudaron de conferencia haciendo que se consagre la gran diferencia que hay entre el nivel del Oeste con respecto al del Este (Jimmy Butler fue traspasado a Minnesota, Paul George y Carmelo Anthony a Oklahoma City y Paul Millsap firmó con Denver).
Los alicientes con los que contará el nuevo curso baloncestístico en la NBA son infinitos. En la Conferencia Oeste, a pesar de contar con un claro favorito como son los Warriors, el nivel medio ha crecido significativamente. San Antonio Spurs, Houston Rockets y Oklahoma City Thunder serán los encargados de poner en problemas a Golden State, mientras que a otras franquicias como Denver Nuggets o Minnesota Timberwolves se les presume un incremento notable de nivel.
A priori, la zona medio-alta debería estar formada por equipos habituales en playoffs: Memphis Grizzlies, Portland Trail Blazers o Los Ángeles Clippers, pero no habría que descartar posibles sorpresas. El talento que reúnen los Pelicans con Anthony Davis y DeMarcus Coursins o el gran trabajo que está realizando Quin Snyder en Utah podría tener sus frutos en la temporada regular. Al mismo tiempo, tendremos que estar pendientes de franquicias que están intentando crecer a través de procesos de reconstrucción. Dallas Mavericks, Los Ángeles Lakers, Sacramentos Kings o Phoenix Suns serían ejemplos de este último grupo.
En la Conferencia Este el liderato debería estar más disputado. En los últimos años estamos viendo cómo LeBron James suele utilizar la regular season para preparar las eliminatorias por el título, así que no sorprendería ver a los Cavs sin dar su máximo nivel hasta el mes de abril. Por el contrario, franquicias como Boston Celtics o Washington Wizards podrían aprovechar esta circunstancia para pelear por un primer puesto que les otorgaría el factor cancha en playoffs. Justo por debajo, los Bucks y los Raptors son los principales candidatos a hacerse con los puestos que van entre el 3 y el 5 del Este.
A partir de ahí, la conferencia es una incógnita. Charlotte Hornets y Detroit Pistons deberían tener un punto de madurez que otros proyectos aún no obtuvieron, pero no han demostrado la fiabilidad que sus plantillas deberían. Por contra, Miami Heat sí parece estar dispuesto a dar un paso más en el crecimiento que ya demostró la pasada temporada.
Mención aparte merecen los Philadelphia 76ers. Con la recuperación de Ben Simmons, la elección en el draft de Markelle Fultz y el optimismo con respecto a Joel Embiid, todo hace presagiar un gran año para los Sixers. Después de varias temporadas sin competir, parece que ahora sí tienen el talento suficiente no sólo para evolucionar, sino para dejar su huella en la NBA en los próximos tiempos.
La parte baja del Este será poco menos que el desierto competitivo. La mayoría de franquicias están sumidas en procesos de reconstrucción, por lo que, quitando alguna sorpresa, lo normal sería que se dedicaran a hacer crecer a sus jugadores jóvenes (D’Angelo Russell, Miles Turner o Dennis Schröder parecen estar destinados a hacer un gran año; sin olvidarnos, por supuesto, del letón Kristaps Porzingis).
Draymond Green tiene un mensaje para vosotros. Y recordad, #dormiresdecobardes pic.twitter.com/o4KkGs24qa
— NBA en Movistar+ (@nbaplus) 13 outubro 2017
Cuatro meses después de las finales entre Golden State Warriors y Cleveland Cavaliers, la NBA se convertirá de nuevo en el epicentro del deporte mundial. Boston – Cleveland y Houston – Golden State serán los partidos que abrirán la jornada del martes. A los aficionados sólo nos queda una cosa: sentarnos y disfrutar.