Las condiciones meteorológicas, con la lluvia amenazando con irrumpir y un viento que hacía especialmente complicado el tramo en el río, hicieron que la novena edición del Triatlón Concello do Porriño se convirtiera en una de las ediciones más duras hasta el momento. El alcalde porriñés, Alejandro Lorenzo, acompañado por su homólogo en Tui, Enrique Cabaleiro, y los concelleiros de Deportes de ambos dos concellos, fue el encargado de dar el bocinazo de salida, al primero de los grupos en la Comandancia Naval do Miño, ante un público entregado que animaba a los participantes. Tan solo 10 minutos después, saldrán los triatletas, que no tardaron en coger el ritmo de sus compañeros encontrándose incluso en las aguas del Miño. A continuación, el grupo popular que, como el resto de los participantes completaron los 750 metros de esta primera etapa.
En total fueron 170 triatletas, que de continuación, cogieron la bicicleta, y encararon los 20,22 kilómetros que separan la transición de Tui con la de O Porriño, donde dejaron las bicis para comenzar la última etapa, la carrera a pie. Cinco kilómetros hasta la meta instalada en la Praza Arquitecto Antonio Palacios. El primero en cruzar la meta fue Romaric Forques, triatleta del Cidade de Lugo Fluvial, que se anotó un brillante triunfo. Llegó en cabeza seguido de su compañero de club, David González, que finalizó la prueba cuatro segundos después. El podio masculino absoluto lo completa Xoel Rodríguez, del Club Deportivo Delikia, que logró un tiempo de 0:56:48.
Mini Triatlón Concello do Porriño
La lluvia no frenó el pasado sábado a mini atletas de O Porriño. Cerca de 40 niñas y niños de entre 4 y 10 años disputaron la prueba para pequeños que abre cada año el Triatlón Concello do Porriño. Acompañados en todo momento por un adulto pusieron el bañador y saltaron a la piscina municipal a completar los 25 metros de natación de la primera prueba. Corriendo salieron a cambiarse y hacer la primera transición, donde cogieron la bicicleta y el alcalde, Alejandro Lorenzo, dio la salida a la etapa de ciclismo. En la bici recorrieron los 700 metros que separan la piscina de la Igrexa Santa María, donde dejaron las bicis para enfrentar la etapa de atletismo completando a pie hasta la meta en la plaza del Concello.