"La parada de autobús del Bicentenario estará en Porta do Sol". Con esta metáfora, el alcalde de Vigo, Abel Caballero, resumía el espíritu que comanda parte de la nueva humanización en el entorno del Concello y que sumará cuatro nuevas rampas mecánicas (tres convencionales y una i-walk) para facilitar la movilidad en una calle de gran pendiente.
La Xunta de Goberno local ha aprobado este viernes la transformación del Paseo de Granada, que curiosamente no invita al paseo al tener una pendiente cercana al 10% que dificulta la movilidad peatonal. Para solucionarlo, el Concello instalará una sucesión de soluciones mecánicas con las que facilitar el acceso a los pies de O Castro, en la Plaza del Bicentenario y mejorar también la llegada a una popular parada de buses ubicada en este entorno, en Camelias.
"Seguimos haciendo de Vigo la ciudad de la movilidad con rampas mecánicas como ninguna ciudad del mundo", subrayó Caballero para recordar que la actuación construirá tres rampas mecánicas -de 35, 38 y 35 metros- además de un pasillo rodante i-walk de 12 metros en la parte alta de la calle. Toda la humanización actuará a lo largo de 210 metros y abarcará una superficie de 3.300 metros cuadrados.
Por otro lado, el carril bici se prolongará hasta Abeleira Menéndez, ya en el Casco Vello, y se mejorará la iluminación pasando de 12 a 21 puntos de luz, que a su vez reducirá la potencia hasta un 25% buscando un ahorro energético. Por otra parte, además de ampliar aceras, las obras implicarán, como de costumbre, nuevo mobiliario urbano -bancos, papeleras, puntos de recarga de coches eléctricos- y la disposición de zonas ajardinadas manteniendo los árboles actuales.
Ahora, tras aprobarse el proyecto, la Xunta de Goberno local deberá aprobar en las próximas semanas la licitación de las obras para poder contratar los trabajos. Una vez arranquen, el plazo de ejecución será de 15 meses.