Aqualia, la concesionaria municipal encargada del ciclo del agua en Vigo, ha defendido que la conservación y el mantenimiento de la presa de Eiras le corresponde a Augas de Galicia desde el 25 de enero de 2023, en virtud del acta de entrega a ese organismo.
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En un comunicado, la empresa ha salido al paso tras las últimas informaciones sobre las válvulas dañadas en dicha presa, después de que la Xunta urgiese al Concello olívico que actuase ante los "graves daños" detectados en dos válvulas que regulan el flujo de Eiras hacia la estación potabilizadora.
Tal como explica Aqualia, las Normas de Explotación de la presa de Eiras, aprobadas por Augas de Galicia en 2010, establecen la obligación de realizar revisiones periódicas -semanales, mensuales y semestrales- en tomas de agua y compuertas.
"Estos trabajos fueron ejecutados por Aqualia hasta el 25 de enero de 2023, fecha en la que se firmó acta de entrega y se realiza, por parte del Concello de Vigo, la entrega de todas las llaves de las instalaciones de la presa a Augas de Galicia", ha reivindicado.
Tras ello, el organismo autonómico estableció un protocolo para el control de acceso a las instalaciones y pasa a gestionar el servicio de explotación, conservación y mantenimiento de la presa y de sus equipos e instalaciones, añade la empresa.
Entre otras aclaraciones, Aqualia indica que en abril de este año fue Augas de Galicia el que realizó una prueba de los órganos de desagüe de la presa, encontrando dos incidencias que afectaban a dos de las cuatro válvulas. Sin embargo, la firma lamenta que "todavía no fueron resueltas" estos problemas y no fue hasta el 11 de noviembre cuando se alertó al Concello, siempre según el comunicado de Aqualia.