Los datos “están yendo francamente bien”. Así valoró el alcalde de Vigo, Abel Caballero, este jueves el comportamiento turístico de la ciudad después de que los hoteles vigueses registraran una ocupación media del 92% el fin de semana pasado, coincidiendo con la celebración de O Marisquiño. Para este fin de semana de San Roque, las estimaciones municipales son todavía mejores y apuntan a rozar el lleno, con una previsión del 95% de ocupación hotelera.
“Está siendo una buena temporada turística”, aseguró el regidor vigués para afirmar que “Vigo se está consolidando como destino turístico en verano, en otoño y en invierno”. Para el alcalde de Vigo, la ciudad es "un gran destino por las playas, la hostelería, la calidad gastronómica, la belleza y la amabilidad". A mayores, Caballero considera que aunque el verano ofrece cifras positivas, el verdadero salto se da en Navidad: "nos convertimos en destino turístico europeo", aseguró.
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