“El proyecto de Gran Vía no se toca”. Así de tajante ha sido Abel Caballero, que ha anunciado que la obra de las escaleras mecánicas arrancará “de forma inmediata” con la licitación y adjudicación de la actuación en tres de los tramos para “salvar los fondos europeos”.
El regidor vigués señaló que la obra se hará finalmente en dos fases tras el dictamen de Patrimonio la pasada semana. La actuación se iniciará entre María Berdiales a Venezuela, que en el proyecto compone tres tramos. Este parte supone aproximadamente la mitad de la avenida viguesa y no se ve afectado por el informe de la Xunta de Galicia. La reforma total está compuesta por seis tramos. De momento, queda exento los dos tramos que están situados cerca de Praza de España y el más próximo al cruce de Urzáiz con Gran Vía.
Abel Caballero confirmó que en esta primera fase de la obra no hay edificios afectados, por lo que la reforma se "hará lo antes posible". El alcalde de la urbe gallega resaltó que Feijóo "no defendió el dictamen en contra de la Gran Vía". Caballero insistió que la arquitecta no puso ninguna alegación a la obra principal del proyecto de Vigo Vertical, que, de momento, tiene su máximo exponente en las escaleras de la II República que unen Porta do Sol con Praza do Rei.
Con las declaraciones de este lunes, el regidor de la ciudad olívica añade un capítulo más a la batalla entre Concello y Xunta de Galicia. Además de las protestas defendidas por el PP de Vigo y En Marea, el último episodio fue el dictamen emitido por Patrimonio la pasada semana, un informe que obligaba al Ejecutivo local a "reformular" el proyecto de la Gran Vía. Caballero ha optado por hacerlo en dos fases. La primera "arrancará de forma inmediata" con la licitación de tres de los seis tramos, la zona que va de María Berdiales a Venezuela.