Buenos resultados para la calidad del agua de baño en Galicia. La playas marítimas y fluviales gallegas logran esta temporada mejorar significativamente con respecto al pasado año y el número de suspensos se reduce a ocho, frente a los doce de 2018. Son datos de la Agencia Europea de Medio Ambiente (EEA por sus siglas en inglés), que este jueves ha hecho pública su clasificación de 21.831 arenales de toda Europa.
En Galicia se han analizado 502 playas aptas para el baño -tanto en cauces de ríos, como marítimas o en lagos- (16 más que en 2018). Del total, lograron hacerse con la máxima puntuación, con una calidad de agua “excelente”, el 85,05% -un total de 427-. Es un dato más que significativo, y que indica la buena salud de la mayoría de nuestros arenales, aunque se queda a unas décimas de la media europea de playas con esta nota (85,1% de los arenales europeos cuentan con aguas “excelentes”).
Para calcular los niveles de calidad (según la directiva europea 2006/7 son pobre -o insuficiente-, suficiente, buena y excelente) se tienen en cuenta los datos de control de las últimas cuatro temporadas en las que se deben tomar 16 muestras por temporada midiendo los niveles de Enterococo intestinal y Escherichia coli.
Así, para esta temporada de baño, las Rías Baixas logran que todos los arenales analizados cuenten con, al menos, una nota de “suficiente”, en cuanto a la limpieza de las aguas. Son precisamente las playas de A Calzoa, en Vigo, Laño, en Poio, y A Concha, en Vilagarcía, las que obtienen esta nota en la provincia. En el apartado fluvial, son la Praia de San Roque (Ponteareas) y la de O Val (Mondariz), ambas en el río Tea, las que logran un aprobado raspado. [Ver mapa al final de la noticia]
Ni el Área de Vigo ni la provincia de Pontevedra cuentan con ningún arenal catalogado con aguas de calidad insuficiente en esta temporada. La única que mantenía esta clasificación el año pasado, la de Agrelo, en Bueu, logra una rápida mejoría en 12 meses para estar clasificada ahora como “buena”.
En el conjunto de Galicia, solo los arenales de Lires (Cee) y A Virxe do Camiño (Muros) suspenden en el apartado marítimo. En ambas playas, además, el baño estará prohibido desde el próximo año. Una vez que un arenal supera los 5 años con calidad insuficiente, como pasa con ambas, se eliminan de la clasificación oficial. De hecho, en 2016 desaparecieron del censo 18 zonas de baño, en 2017 se cayó una y en 2018 se eliminó A Concha, en Cariño. En todas ellas se prohibió el baño.
Con todo, solo el 1,6% de nuestras playas han suspendido el examen, casi un punto por debajo de la media nacional. En el conjunto de España, 50 playas se llevaron un insuficiente en cuanto a calidad del agua.
A continuación, puedes consulta el mapa con la información histórica y clasificación actual de las playas analizadas en Galicia. Si pinchas en el icono