Ya lo decía el refranero, "hasta el 40 de mayo no te quites el sayo". Vigo vive un lunes totalmente veraniego con temperaturas que alcanzan los 33 grados. Justo cuando se cumpliría este "40 de mayo" el tiempo dará un vuelco radical dejando a un lado los cielos despejados para dar paso a una alerta amarilla con previsión de tormentas y lluvias.
Galicia vivió este lunes una jornada de verano con temperaturas que superaron los 33ºC en el centro de la ciudad olívica. Más subió el mercurio en el área de Vigo, con termómetros que superaron los 35ºC en la estación de Meteogalicia en Atios, en O Porriño. El mismo calos se vivió en otros municipios como Tui, con 34ºC y una sensación térmica de 36ºC, o Salvaterra, donde rozaron los 34ºC y una sensación térmica que escaló hasta los 36ºC. Una situación meteorológica que dejó así un verano anticipado con cientos de personas que se desplazaron a los arenales de la ría de Vigo para disfrutar del buen tiempo y los primeros chapuzones. Pero, nada dura para siempre.
Alerta amarilla por tormentas
Este tiempo de verano cambiará radicalmente en apenas 24 horas. Y aunque el termómetro seguirá alto, el cielo despejado se despedirá para dar paso a episodios de tormentas. Meteogalicia ha activado para este martes 10 de junio una alerta amarilla en gran parte la provincia de Pontevedra por tormentas y lluvias. Según explica la agencia gallega, el aviso se activará este martes alrededor de las 21:00 horas en el litoral de Pontevedra y en la zona del Miño, manteniéndose hasta las 6:00 horas. Se prevén "tormentas con lluvias localmente fuertes".
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Con todo, las temperaturas seguirán altas alcanzando los 25ºC en Vigo, los 31ºC en Salceda de Caselas, los 30ºC en O Porriño o los 32ºC en Salvaterra de Miño. A partir del miércoles 11, comenzarán a descender bajando de los 25ºC en prácticamente todos los concellos del área de Vigo.
Durante el resto de la semana Vigo sufrirá un descenso paulatino de las temperaturas y un tiempo marcado por la inestabilidad con lluvias intermitentes al menos hasta el viernes. Aún con la incertidumbre propia de la época del año, que dificulta la previsión a largo plazo, se espera que el fin de semana la situación comience a mejorar y regrese de nuevo el tiempo anticiclónico.
