El grupo municipal del Partido Popular de Vigo alertó este jueves de los continuos sobrecostes en las obras municipales tras detectar un desfase del 25%, en esta ocasión, en la reciente reforma de la Plaza Fernández del Riego -conocida popularmente como Plaza Elíptica-. Es la última obra en sumarse a un largo listado de revisiones de precios sobre las que los populares llevan tiempo poniendo la lupa.
Un escándalo a ojos del edil popular Fernando G. Abeijón, quien informó de que el modificado del proyecto no se ha publicado en la plataforma pública de contratación hasta esta semana. Y por si esto fuera poco, “fue aprobado -dijo- de tapadillo en una junta de gobierno local extraordinaria y urgente convocada para el mediodía de la última jornada hábil de 2022”.
En esta misma dirección, Abeijón lamentó que el presupuesto de la obra -adjudicada por 2.041.832 euros- haya aumentado un 25% por culpa de un sobrecoste de 446.215 euros. Un importe que la empresa aceptó oficialmente el pasado mes de noviembre de 2023.
“Fechas aparte, estamos ante el enésimo sobrecoste de este gobierno socialista. El ascensor Halo, cada grada que se reforma en el estadio de Balaídos, el túnel de la Puerta del Sol, los accesos a Vialia... Las arcas municipales afrontan continuamente revisiones de presupuesto al alza, que suelen ir acompañadas de incumplimientos en los plazos de ejecución. Las obras son necesarias en cualquier ciudad, pero deben mejorar la calidad de vida de la gente, no generar encarecimientos continuos”, recordó el edil popular.
A colación, Abeijón llamó la atención sobre la necesidad de reforzar el mantenimiento de las obras que se ejecutan. Según anotó, en el teléfono 010, la web municipal y la aplicación móvil ‘Vigo’ se han recibido numerosas quejas sobre el estado de la Plaza Fernández del Riego. Entre ellas, citó las que apuntan a suciedad, pintadas, fuentes que no funcionan, bocas de riego que pierden agua, césped pisoteado o bancos incómodos que la gente ya solicita sustituir.
Eso sí, recordó sobre una obra que tardó más de un año en completarse, que “Caballero no perdió la oportunidad de inaugurarla dos veces antes de las pasadas elecciones municipales”, primero en abril y luego aprovechando el Día das Letras Galegas. Por supuesto, “sin decir nada de un sobrecoste que ya conocía” y que se tenía “muy calladito”.
Ya para terminar, censuró el “excesivo afán de protagonismo” de un alcalde “obcecado por conseguir fotos y titulares”. “Eso sí, si una obra cuesta dos millones o dos millones y medio ya le importa menos”, concluyo el concejal vigués.