El BNG de Mos ha alertado este martes sobre el riesgo existente en diferentes instalaciones municipales ante el incumplimiento de la normativa contra incendios. Según denuncian los nacionalistas, de acuerdo con las etiquetas de mantenimiento, los extintores y las bocas de incendios fueron revisadas, por última vez, en junio de 2022, "cuando la normativa vigente establece que los equipos de protección contra el fuego deben ser revisados, como mínimo, una vez al año".
El portavoz del BNG en Mos, Gustavo Barcia, lamenta “el desinterés del gobierno del PP ante la necesidad de garantizar las mínimas condiciones de seguridad, tanto para el personal municipal cómo para las personas usuarias de las equipaciones públicas” y pide explicaciones.
El problema, tal como indica Barcia, “no se limita a un simple descuido puntual”, ya que el gobierno de Nidia Arévalo todavía no aprobó la licitación de una empresa de mantenimiento de extintores y sistemas antiincendio, según denuncian. Ahora mismo, "nadie se hace cargo del correcto funcionamiento de los dispositivos instalados en edificios que usan diariamente cientos de personas", señalan, para mencionar los casos del edificio del Concello, el multiusos de As Pozas o los pabellones deportivos. Un hecho similar sucedió hace solo unos meses en Vigo. En la ciudad olívica era el PP el que alertaba sobre extintores que "llevan años sin pasar revisión obligatoria".
La “desidia” del gobierno local a la hora de cumplir la normativa en materia de protección contra el fuego contrasta, en opinión del portavoz del BNG, con un “interés desmesurado” por aprobar “gastos propagandísticos y suntuarios” y pone como ejemplo a licitación del renting de un vehículo de alta gama para uso de la Alcaldía. Barcia denuncia que “el PP tiene mucha prisa a la hora de adquirir un coche oficial, pero olvida contratar los servicios de seguridad más elementales”.