Pelea en la mañana del domingo en Samil. La Sala de Comunicaciones del 092 de la Policía Local de Vigo recibió una llamada minutos antes de las 13:00 horas advirtiendo de un altercado en la Avenida de Samil. La llamada fue realizada por el personal del 112, que se dirigían a la zona ajardinada, concretamente donde se realiza el mercado al producirse una pelea. En el lugar de los hechos, los agentes comprobaron que uno de los vendedores ambulantes estaba sangrando por la cabeza y estaba increpando a una pareja.
El aludido resultó ser M.F.A, de Marruecos y 44 años de edad, que manifestó a los policías que aproximadamente le habían agredido unas veinte personas. El individuo presentaba un corte en la ceja izquierda con derrame, así como un corte en la barbilla, siendo atendido en primera instancia por los sanitarios que realizan servicio en la playa, y posteriormente trasladado por una ambulancia al Hospital Álvaro Cunqueiro para efectuar una valoración, ya que según indican fuentes policiales se requerían puntos de sutura y efectuar otras pruebas médicas.
Al lugar de los hechos se desplazó I.D.A.V.L, de Portugal y 42 años de edad, manifestando que le había comprado una radio y al comprobar que no funcionaba volvió al puesto para exigir la devolución del dinero. El individuó indicó que no solo no se lo quiso devolver, sino que la empujó, mediando en la disputa la hija de la mencionada; C.S.L.R, de 17 años de edad, que estaba embarazada, y que denunciaba que también sufrió empujones. El marido y padre de las dos mujeres, P.J.P.R, de Portugal y 40 años de edad, aseguró ser la única persona que interactuó con la supuesta víctima mientras que los otros aludidos se habían limitado a tratar de separarles, yendo cada vez a más la discusión.
El individuo de 40 años recriminó a la supuesta víctima su actitud hacia las mujeres, tornándose la discusión en un pelea entre ambos que concluyó con las lesiones ya relatadas. En atención a estos hechos, los agentes informaron al hombre de 40 años que iban a proceder a su detención por la supuesta comisión de un delito de lesiones. En el momento de informar al ciudadano de su arresto, éste se desvaneció activándose el protocolo con la unidad de salvamento e iniciando una RCP. Se acordonó el lugar ante la presencia de viandantes, tapando las zonas de visibilidad con vehículos policiales para facilitar la labor de los servicios sanitarios.
Al lugar acudieron dos ambulancias, una medicalizada para el agresor -trasladado en calidad de detenido y custodiado- y otra para el agredido, ambos trasladados al mismo centro médico.