Vigo contará en un plazo de 14 meses, antes de las elecciones municipales, con un gran carril bici que conectará Samil con Teis y la futura senda verde por la vieja vía del tren. Esta gran arteria que permitirá cruzar la ciudad, desde sus playas hasta una de las entradas a la ciudad, se alza como “una de las más importantes obras que contratamos nunca en procesos de humanización”, según el alcalde, Abel Caballero.
Sin embargo, no todo el recorrido, cercano a los 10 kilómetros, será de uso exclusivo para ciclistas. El nuevo itinerario estará dividido en cinco tramos de actuaciones que se diferenciarán por la solución sobre la que circularán los usuarios. Según el proyecto de la vía ciclista aprobado en Junta de Gobierno, en algunos puntos, los ciclistas irán al nivel de la acera, separados de la carretera, en otros, estarán en la misma calzada, pero con un carril separado y de uso exclusivo, mientras que, en el peor de los casos, tendrán que compartir la calle en un carril donde gozarán de preferencia y en el que se reducirá la velocidad de circulación.
1. Carril exclusivo al nivel de la acera
La mejor solución, aquella en la que el carril se sitúa alejado de la carretera y al mismo nivel que la acera, es la elegida para la Avenida de Castelao, desde su conexión con la Avenida de Europa hasta Camelias. En buen parte del recorrido el carril irá en la zona verde, en el lado opuesto a la calle.
2. Carril al nivel de la calzada, pero separado y exclusivo
La segunda solución por la que ha optado el Concello de Vigo es la de situar el carril bici en el mismo plano que la calzada, pero siendo de uso exclusivo para ciclistas. En algunos casos, basta con ampliar la vía hacia las cunetas, como en la Avenida de Europa, donde no desaparece ningún carril, mientras que en otros es necesario reorganizar el tráfico o reducir las medianas.
En el tramo entre la Praza da Independencia y el Bicentenerio, el vial ciclista ocupará uno de los tres carriles actuales. De esta forma, se reordena a un carril de bus y otro de uso general, manteniendo los sentidos de circulación. Ya en Venezuela, se reducirá a tres el número de carriles para vehículos y se dejará una banda de aparcamiento, frente a las dos actuales.
En Pizarro, se merma la sección rodada a un carril de bus y otro para tráfico general, mientras que al legar al cruce con la calle Brasil se le dará continuidad por los jardines. Tras ellos, y hasta llegar a Travesía de Vigo, se continuará con esta solución al nivel de la calzada en detrimento de uno de los carriles de circulación para más adelante, y hasta la rotonda con Jenaro de la Fuente, eliminar parte de la mediana central para generar espacio para la vía ciclista.
También se ha optado por esta solución en el recorrido que va de la rotonda de Travesía con Aragón hasta Buenos Aires, donde el carril bici irá en el margen del centro comercial.
3. Ciclo carril compartido
La solución menos deseada por los usuarios de bicicleta, aquella en la que tienen que compartir vía con los vehículos, ocupará los casi 1,5 kilómetros que van por Travesía de Vigo desde el cruce de Jenaro de la Fuente a la rotonda con Aragón. En esta calle, se modificará la señalización y se transformará la prioridad en las glorietas, generando un carril compartido a velocidad máxima de 30 km/h.
Esa misma solución se aplicará en el tramo entre Praza América e Independencia, donde el ciclo carril ocupará ambos sentidos de circulación, y también en parte de Buenos Aires. Allí, en el final del recorrido, habrá una combinación de ciclo carril y carril exclusivo.
La construcción del carril bici, con una longitud de 10 kilómetros, tiene un plazo de ejecución de 12 meses y un importe de licitación de 5,89 millones de euros.