Es la parte más negativa del fútbol. La violencia, desgraciadamente, se normaliza por parte de clubes e instituciones como la UEFA. Vigo sufre esa barra libre que tienen los grupos ultras de algunos equipos. Estos días está sufriendo con los radicales del Niza, que ya registraron los primeros incidentes en la ciudad olívica anoche y en la tarde de este jueves son los principales causantes del tráfico lento que se está viviendo en zonas como la Avenida de Beiramar en dirección Bouzas, donde un carril estaba cortado para facilitar que hasta cinco furgones de la Policía Nacional escoltaran a este grupo de aficionados radicales del conjunto francés.
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Pasadas las 18:30 horas el dispositivo de la Policía Nacional escoltaba a este numeroso grupo de radicales del Niza. Hay que recordar que el encuentro entre el Celta y el equipo francés que se disputa a partir de las 21:00 horas en Balaídos ha sido declarado de alto riesgo por la Comisión de Antiviolencia. Esta medida supone que haya refuerzo policial y unas mayores restricciones para evitar la concentración de hinchas en los aledaños de Balaídos. Conductores que sufrieron esta tarde la congestión de tráfico en Beiramar relataban a Metropolitano.gal la deplorable actitud de estos hinchas radicales, que mientras caminaban escoltados iban arrojando al suelo botellas de cerveza.
Los ultras del Niza son peligrosos. En 2021 acudieron al estadio del club francés para intentar agredir a jugadores de su equipo. En 2022 se vivió otro incidente. Sucedió en un encuentro de la Conference League ante el Colonia, que tuvo que ser aplazado por el lanzamiento de bengalas de este grupo de radicales. Por otro lado, en un encuentro ante la Roma de la Europa League, la policía gala llegó a arrestar a más de cien aficionados del equipo italiano que en Niza iban a enfrentarse a los ultras franceses.
