El segundo tramo de las rampas mecánicas en la Gran Vía de Vigo ya tiene fecha oficial de inauguración. Tras varios retrasos -su finalización estaba previsto para navidades- este viernes 24 de marzo el alcalde, Abel Caballero, cortará la cinta que permitirá conectar la calle Venezuela con Plaza de España a través de esta nueva forma de movilidad que, en palabras del regidor vigués se erige como “una nueva forma de entender la ciudad, los bulevares y el paseo”.
La actuación, que completa el primer tramo ya construido entre María Berdiales y Venezuela, permite subir en rampas mecánicas hasta la calle Nicaragua, prácticamente ya en Plaza de España. “Eliminamos coches con un sistema eléctrico sin ruidos y 100% de energía renovable”, subrayó este miércoles el regidor vigués para anunciar la fecha de apertura de la actuación.
Además de las propias rampas mecánicas bajo los pórticos de colores, también se ha instalado en el bulevar central diferentes elementos singulares, como un “pezseto” en la parte alta de la avenida viguesa, así como un “acuario virtual interactivo” o un pavimento que genera energía al pisarlo. Las obras han tenido un coste de 4,2 millones de euros de los que el Gobierno de España ha financiado 3,1 millones a través de los fondos europeos NextGeneration.
“Vamos a construir rampas, escaleras y ascensores a todo lo largo y ancho de Vigo”, insistió Caballero. Las rampas de Gran Vía son una de las actuaciones más destacadas del Vigo Vertical, el programa municipal que busca mejorar la movilidad urbana dando prioridad a los peatones en detrimento de los vehículos. Pendiente sigue el tramo entre Urzáiz y María Berdiales, paralizado por Patrimonio y que implicaría la polémica retirada de los Rederos, el monumento al trabajo de Ramón Conde. Por otra parte, tal y como avanzó en una entrevista con este diario en octubre del año pasado, el Gobierno local pretende en los próximos cuatro años ejecutar la misma obra en el otro tramo de la avenida, entre Plaza de España y Plaza América.