La Corporación Municipal de Vigo entró este miércoles en el debate abierto en España sobre un eventual abono directo de las autovías del Estado por parte de los conductores, que el Gobierno de España prometió en sus documentos remitidos a la Unión Europea y que se traducirían en una nueva carga impositiva más para los bolsillos de los ciudadanos. Todos los grupos políticos del pleno rechazaron la medida planteada por el Ejecutivo de Pedro Sánchez.
Presentada por el concelleiro del BNG, Xabier Pérez Igrexas, la moción plasma la negativa del Concello “a establecer peajes en las autovías de titularidad estatal, por considerarla una medida regresiva que establece barreras económicas en el acceso a servicios básicos como son las infraestructuras viarias, que incrementa la inseguridad viaria y que supone un atranco para el desarrollo económico y la cohesión social de Galicia”.
La iniciativa también proponía denunciar el “agravio y la discriminación” que implican los peajes en las AG55 y AG57, ambas de titularidad autonómica. La propuesta elevada al Pleno fue la de “instar a la Xunta de Galicia a la reducción y paulatina eliminación de los peajes” en estas dos autovías “por el agravio que supone para las personas residentes y empresas de las respectivas comarcas por las que transcurren”, que en el caso de la AG57 afecta a Vigo y su área, al enlazar la VG20 con O Val Miñor. Con una votación separada en este punto, la cuestión no obtuvo en esta ocasión el respaldo unánime del Pleno pero sí el mayoritario, con el que fue aprobado con la única abstención del grupo municipal del PP.