Antes de lo previsto, los operarios encargados de la instalación del Cristo del Sagrado Corazón en la capilla de A Guía, la parroquia viguesa de Teis, han finalizado los trabajos de instalación de la figura, financiada por el Concello de Vigo y por la Diputación de Pontevedra y elaborada por la Escola de Cantería de Pontevedra, dependiente de la administración provincial.
El enorme Cristo, de seis toneladas, que tuvo un coste de 84.000 euros, estaba proyectado inicialmente en el proyecto de Manuel Gómez Román para la ermita de A Guía en 1951 en plena dictadura franquista, pero los problemas económicos del momento, en una sociedad empobrecida, obligaron a cancelar la instalación de la escultura. Ahora, bajo el Gobierno socialista de Abel Caballero se retoma ese boceto inicial para rematar el templo.
Aunque estaba previsto que los trabajos finalizaran este mediodía, finalmente a primera hora de la mañana se completó la difícil tarea de subir la última pieza de la figura, la que mayor reto supuso, según los operarios encargados de alzarla. Con todo, los trabajos no están completamente finalizados, ya que todavía resta por instalar el necesario pararrayos que irá instalada en la espalda del mismo.
La figura, que ha cambiado ya el skyline vigués, se ha erigido con la oposición de una parte del sector cultural y también de la oposición de izquierdas. La Asemblea Republicana de Vigo expresó este martes su rechazo al "uso de diñeiros públicos na colocación dunha imaxe relixiosa" y abogó por defender la "aconfesionalidade do Estado".
¿Es el Cristo gigante que Caballero instala en A Guía una figura franquista?
La polémica está servida. La instalación del enorme Cristo de seis metros de alto sobre la capilla de A Guía ha levantado un acalorado debate en redes sociales no solo por la idoneidad de que se pague con dinero público una figura religiosa, sino también por su posible vinculación con la dictadura franquista y sectores antidemocráticos.
El historiador Lucio Martínez Pereda, especializado en la represión franquista, ha elaborado un extenso hilo en Twitter en el que vincula la estatua del Sagrado Corazón de Jesús que Concello de Vigo y Diputación han construido para la Guía como una figura representativa del los Guerrilleros de Cristo Rey, un grupo terrorista de ultraderecha. Para Martínez Pereda es un “desprestigio para Vigo convertirse en la única ciudad del Estado en pagar con dinero público de un ayuntamiento socialista una estatua con la imagen religiosa que ha representado con mayor intensidad el cruzadismo belicista del nacional catolicismo”.
Abel Caballero no es consciente del desprecio que eso supondría para la memoria de los militantes de su propio partido que fueron asesinados en el verano de 1936 por personas que rendían culto a esta imagen cruzadista.
— Lucio Martínez Pereda (@anluma99) May 5, 2022
El historiador analiza el origen de la figura, "nacida en la Francia antirrevolucionaria" y traída a España por los jesuitas. “Durante la restauración alfonsina el Sagrado Corazón de Jesús se convirtió en un rito político-religioso contra la creciente cultura política democrática republicana. La devoción a Cristo Rey se extendió por todo el país durante la dictadura de Primo de Rivera”, explica el profesor para añadir que “la funcionalidad antidemocrática de este culto se reactivó durante la guerra civil en la zona Alzada”.
Martínez Pereda considera que con la instalación de la figura Vigo se convertirá “en el principal punto de peregrinaje para todos los grupos fascistas y de ultraderecha del estado español.”
No son de la misma opinión otros usuarios de la misma red social. Otros ciudadanos consideran que la obra “é o proxecto dun arquitecto de prestixio” como Gómez Román que, recuerdan, “foi secretario xeral do Partido Galeguista, vicepresidente de Galaxia, membro da Real Academia Galega e promotor das Letras Galegas”.
Para los defensores de la iniciativa, la instalación del Cristo supone “completar el proyecto original” de 1951 y dotar a la capilla de un elemento distintivo. Aquellos que están a favor del proyecto argumentan que se trata de un símbolo religioso dentro del proyecto original sin la carga ideológica que sus detractores le incorporan y lo comparan con el Cristo Redentor o del Corcovado de Río de Janeiro, todo un elemento distintivo de la ciudad brasileña.
Gómez Román presentando en 1951 o proxecto da capela da Guía coroada polo Cristo que se completará nuns días.
Sorprenden as críticas de certos galeguistas á iniciativa do Concello de completar a obra proxectada por un arquitecto que foi membro da RAG e promotor do Día das Letras. pic.twitter.com/ycPHReL1zj— Jonathan Chapela (@JChapela_) May 8, 2022