El portavoz municipal Alfonso Marnotes y el concejal Jesús Marco González comparecieron, esta mañana en rueda de prensa, para exigir a Abel Caballero que releve a la concejala Elena Espinosa de todas sus funciones de gobierno, ya que desde que la concejala tomó posesión, hace dos años, se ha visto envuelta en una polémica tras otra “Primero conocimos que ostentaba cargos en una sociedad en un paraíso fiscal. Pedimos varias veces su dimisión. Abel Caballero hizo oídos sordos. La mantuvo a pesar de la gravedad de los hechos. Y Elena Espinosa se rio de todos y no dimitió”, afirmó el portavoz.
Los populares vigueses denuncian que se acumulan las sentencias que la condenan incluso por vulnerar derechos fundamentales de los trabajadores. Apuntan que tuvo problemas con toda la plantilla, "con desprecio al personal que denunciaba colapso de los servicios públicos": falta generalizada de personal en todos los departamentos, no se cubren las bajas ni las ausencias del personal como consecuencia de sus vacaciones u otros permisos, etc. “Esta situación provoca una vulneración de los derechos del resto de los trabajadores y una deficiencia o nula prestación de los servicios, que nunca ha ocurrido en este Ayuntamiento. Hay 300 plazas sin cubrir, una de cada cuatro. Hay 100 policías menos que en el año 2007. La plantilla de los bomberos es tan escasa que no se cubren los servicios mínimos. El propio personal municipal reconoce que esta insuficiencia de medios humanos se traduce en una deficiente o nula prestación del servicio a la ciudadanía, como, por ejemplo, en las largas colas en el Concello o que para que el personal reciba a un ciudadano tenga que esperar 30 días. Además, provoca frecuente vulneración de los derechos estatutarios de las personas trabajadoras, derechos que en no pocas ocasiones son denegados, suspendidos o limitados, como acontece con los permisos de conciliación familiar, las vacaciones o asuntos propios. “La falta de personal es tan palmaria, que se obliga a trabajar en los días libres, obligando a los funcionarios a acudir a la vía judicial para que se cumplan sus derechos”, añadió Alfonso Marnotes.
“Las ofertas de empleo público se acumulan una tras otra y desde el año 2014 están sin ejecutar. Los opositores de las OPES desde 2014 a 2017 han pagado la tasa y no han vuelto a saber nada”, aseguró. Además, se produjo una histórica unanimidad de los trabajadores del Concello contra la concejala de Personal. Por primera vez, representantes de todos los trabajadores se concentraron en el Concello y se pusieron de acuerdo para pedir la dimisión de Elena Espinosa en las áreas de Personal y Seguridad. Y su nefasta trayectoria sigue con la sentencia de los enchufes, la que dice que no son admisibles nombramientos a dedo, eludiendo convocatoria pública y concurso de méritos, una resolución judicial de una enorme gravedad que ha sido la gota que colmó el vaso.
“La reacción de Abel Caballero a esta nefasta gestión ha sido abrir una crisis de gobierno, desautorizar a Elena Espinosa, reconocer su incompetencia y retirarle sus responsabilidades en materia de Personal. Pero la cierra en falso, porque le mantiene otras, como Economía y Empresa o Seguridad, cuando la gestión de las emergencias en esta ciudad es caótica: no existe un Plan de Emergencia Municipal, en ocasiones, solo hay dos patrullas de Policía Local para atender a toda la ciudad, en horario nocturno en el rural no hay Policía Local, ante fenómenos meteorológicos adversos se actúa con improvisación, etc. Son áreas en las que ha creado enormes problemas con el cuerpo de Policía Local y en la que fue incapaz de gestionar, por ejemplo, la ITV de los vehículos, que dio la vuelta a España”, explicó Alfonso Marnotes.
El PP, hace pocos meses, ya había pedido su reprobación en el pleno, que no salió adelante, con el único voto en contra del PSOE que ahora la cesa de concejala de Personal. “Hemos pedido su dimisión en varias ocasiones y ahora el alcalde reconoce que estábamos en lo cierto. Una concejala reprobada por todos los sindicatos, por la oposición, por los tribunales y desautorizada por el alcalde no puede seguir en el ayuntamiento. Tiene que irse a su casa. Si después de toda esta trayectoria, le queda algo de dignidad tiene que dimitir. Y, desde luego, no puede tener ninguna responsabilidad de gobierno”, concluyó Alfonso Marnotes.