El PP tacha de “esperpento” la Gran Vía y promete "recuperarla" manteniendo las rampas

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El Partido Popular se ha comprometido este jueves a acabar con el “esperpento” que a juicio de su portavoz, Alfonso Marnotes, constituye la humanización de la Gran Vía de Vigo. Conmemorado el 75 aniversario de la apertura de la calle, inaugurada el 24 de agosto de 1945 por el dictador Francisco Franco, entonces con el nombre de Avenida del Generalísimo, los concejales del grupo municipal popular tacharon la humanización de la calle como “propia de un polígono industrial”.

El portavoz popular, Alfonso Marnotes, explicó que "la Gran Vía se diseñó y se construyó tal y como la conocemos ahora", con aceras arboladas, con dos calzadas y un bulevar central también arbolado y con bancos de piedra. “Vigo quería una Gran Vía como la que tenía Madrid, Barcelona o Bilbao. Así que hicieron uno de los bulevares más grandes y más hermosos de España: la Gran Vía de Vigo es dos veces y media la de Madrid y una vez y media más ancha. Ahí hubo visión: tres kilómetros y medio de largo y 36 metros de ancho. Y un rasgo distintivo: ni la gran Vía de Madrid, ni la de Barcelona, ni la de Bilbao tenían un bulevar central”.

Alfonso Marnotes aseguró que “hoy, 75 años después, un alcalde que se cree un mesías que viene a redimirnos, un salvador que se cree que la ciudad es fea y está mal hecha y quiere hacérnoslo creer a nosotros también, ha arrasado con un tramo completo y pretende hacer lo mismo con toda la Gran Vía. Usa como excusa algo a lo que nadie se opone y nosotros tampoco: rampas para mejorar la movilidad”.

El PP lamenta que, además de “talar todos los árboles y arrasar con todos los jardines”, se coloquen aceras de hormigón y no de piedra, se quiten farolas de forja y se pongan báculos de luz, que consideran, “más propios de un polígono industrial que de una avenida singular”.

Pero sin duda, las críticas se las lleva la cubierta de las rampas mecánicas, “un armatoste y un adefesio de colores”, en opinión de los populares.

“Vigo no merece un alcalde convencido de que la única manera de mejorar la ciudad es tirarla abajo para hacerla de nuevo y que no quiera dejar otra memoria que la suya.. Abel Caballero ha hecho un esperpento que durará lo que dure él en el gobierno. No nos cabe ninguna duda que en cuanto deje la alcaldía los vigueses recuperaremos nuestra Gran Vía, sanaremos esta mutilación y mantendremos las rampas”, concluyó Alfonso Marnotes.

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