Buenas y malas noticias para el turismo en Vigo durante este mes de agosto. Aunque la ciudad olívica registró este pasado mes el mejor agosto de su historia en pernoctaciones, cae el número de viajeros y se hunden los visitantes extranjeros.
Vigo salvó los muebles en agosto gracias a la explosión del turismo nacional, unos datos que para el alcalde, Abel Caballero, reflejan que la ciudad es ya “un destino turístico referencial en España”.
En agosto, Vigo registró 122.675 pernoctaciones, lo que supuso un crecimiento del 8% con respecto al mismo mes de 2018, cuando se contabilizaron 113.150. Sin embargo, este incremento lo protagoniza el turista nacional, que dispara un 20% sus pernoctaciones (91.575), mientras que las de extranjeros caen casi en 6.000, para quedarse en 31.099.
Los datos también encuentran su equivalencia en el número global de viajeros, pero aquí el turismo nacional no puede frenar la fuerte caída del internacional. En agosto se registraron 49.188 viajeros, 2.206 menos que en el mismo mes de 2018. El dato interanual refleja un ligero crecimiento del turismo nacional en agosto, con 33.677 personas (438 más que en agosto de 2018) que no puede hacer frente al desplome de extranjeros (una caída de 2.644 personas para quedarse en 18.155).
Así, en lo que va de año han pasado 3.520 personas menos por Vigo que en el mismo periodo de 2018, un dato que podría verse explicado por el descenso de vuelos de Peinador. Tras la marcha de Ryanair, el aeropuerto vigués solo cuenta con una única conexión internacional (París) que, además, es temporal ya que finalizará en octubre.