Galicia se entrega de nuevo al proyecto de Alberto Núñez Feijóo. El candidato del PP afrontará su cuarta legislatura tras lograr la mayoría absoluta, a pesar de perder, con el 100% escrutado, más de 66.000 votos. Los populares gallegos logran 41 diputados, uno más que hace cuatro años, y no sufren la presencia en el tablero político de VOX y Ciudadanos, que siguen sin entrar en el Parlamento de Galicia.
El otro dato que nos deja la noche electoral es el resultado histórico del BNG. La candidatura que lidera Ana Pontón lleva al frente nacionalista a lograr el récord de 19 escaños, uno más que el que obtuvo Xosé Manuel Beiras en 1997. Ese resultado convierte a Ana Pontón en alternativa al proyecto de Alberto Núñez Feijóo y líder de la oposición.
Uno de los grandes fracasos de la noche lo ha firmado el PSdeG. Los socialistas gallegos han sido incapaces de mejorar el mal resultado de 2016. Suben a 15 representantes. La candidatura de Gonzalo Caballero parece no calar entre el electorado. Ha sufrido el "sorpassso" de un BNG que se ha beneficiado del voto de izquierdas que en 2016 apoyó a En Marea, un factor determinante para entender que Galicia en Común se quede fuera de la Cámara gallega.
La coalición de Podemos con Esquerda Unida y Anova se queda sin representación en O Hórreo con el 3,91% de los votos. Con una cara que definía el sentimiento de la izquierda rupturista, el candidato Antón Gómez Reino calificó los resultados como “un fracaso para nuestro espacio político, sin paliativos”. Unos datos “inesperados”, aseguró.
Por su parte, Marea Galeguista, heredera oficial de En Marea -lo que le sirvió para tener el espacio de la segunda fuerza del Parlamento en los espacios electorales de las televisiones públicas- se estrella. Tan solo 2.708 gallegos han elegido la papeleta del partido de Pancho Casal, lo que se traduce en un 0,22% del voto. El partido logra menos apoyos que Pacma, Ciudadanos o Vox. A pesar de los nefastos datos, Casal expresó esta noche que “conseguimos construir un proyecto que está en el inicio” y reprochó que “los que viven toda la vida de la política dirán que es un desastre” pero para Casal “el proyecto tira para adelante”.
Otra de las perdedoras de la noche, Beatriz Pino, manifestó que Ciudadanos "seguirá trabajando con más fuerza por Galicia" a pesar de no estar dentro del Parlamento. Por su parte, VOX, a través de Javier Ortega Smith, no supo encajar el fracaso electoral y simplemente quiso agradecer la intervención de la Guardia Civil.
El PP logra en Vigo el peor dato de las ciudades gallegas
El PP logra en Vigo el peor dato de todas las ciudades gallegas y es la única en la que se queda por debajo del 40% de los votos. Con todo, consigue situarse como el partido más votado, pero -con el 97,68% escrutado- se deja 7.869 votos con respecto a 2016. A lo largo de toda la noche electoral, PSOE y PP mantuvieron una fuerte lucha por alzarse como la fuerza dominante. Con todo, menos de un millar de votos separan a los populares de los socialistas, que se quedan como segunda fuerza y 42.308 apoyos. El BNG se dispara con 30.905 votos, 21.402 más que en 2016. Por su parte, Podemos suma 8.008 apoyos y el 6,09% de los votos.
El PP sigue líder en el área de Vigo, pero pierde votos
En la comarca de Vigo, con el 97,43% de los votos, el PP se deja 10.934 votos con respecto a 2016, pero se mantiene como el más votado al lograr 68.956 votos y el 35,76%. El PSdeG-PSOE consigue mantener la segunda fuerza -fundamentalmente gracias a los datos de Vigo- con 56.027 votos (10.242 más). El BNG, por su parte, se queda con 46.077 votos en la comarca de Vigo (31.208 votos).
En O Baixo Miño, con el 98,75% del voto escrutado, el PP es el partido más votado, aunque se deja 1.677 votos en cuatro años y se queda con el 44,65% de los votos. El BNG es la segunda fuerza, con 7.164 votos (suma 3.832) y el PSdeG-PSOE logra 4.143 votos (153 más).
En O Val Miñor, con el 100% del voto escrutado, el PP también pierde votos en todos los municipios, pero sigue siendo la fuerza mayoritaria. Destaca en Baiona, donde Feijóo logra el 50,16% de los votos, en Nigrán consigue el 47,29% y en Gondomar se queda con el 45,17%.
Con el 97% del escrutinio, en O Morrazo el PP perdería 1.897 votos, pero sería la fuerza dominante, con 15.660 votos y el 40,88%. El BNG se alza como la segunda fuerza, con 11.673 votos, sumando 6.625 más que en 2016, mientras que el PSdeG se quedaría con el apoyo de 6.626 personas, ganando 1.310 votos.
El PP, reforzado en A Mariña, epicentro del brote de coronavirus
En los dos municipios más afectados por el brote de coronavirus de A Mariña, Xove y Burela, donde se prohibió acudir a ejercer su derecho al voto a los infectados, el PP arrasa. En Xove logra más del 50% de los votos mientras que en Burela se sitúa en el 45%. En ambos municipios crece el BNG, que se convierte en la segunda fuerza, replicando el resultado del conjunto de Galicia.