La alarma saltó el pasado lunes. El ciclón tropical "Ophelia" se formaba en el suroeste de las Azores y amenazaba Galicia. Los primeros pronósticos apuntaban que podría pasar por el oeste peninsular durante su trayecto hacia las Islas Británicas. Con el paso de los días la amenaza fue menor. En las horas previas al paso del fenómeno meteorológico, que se quedará a unos 500 kilómetros de la costa gallega, podemos resolver varias dudas sobre los efectos de este atípico huracán.
¿Por qué nace un huracán en esta zona?
"Ophelia" surge al suroeste de las Azores, más al norte de donde se forman habitualmente y más cerca de África que de América. Cuando dio sus primeros pasos sobre aguas a 27 grados, se acercó a Europa al verse empujado por los vientos del oeste en lugar de por los alisios, que como sucede normalmente lo llevarían hacia América.
¿Es realmente devastador?
Siguiendo la escala Saffir-Simpson, cuando la fuerza de un ciclón tropical supera la clasificación de tormenta se convierte en huracán. Es entonces cuando se mide en cinco categorías de menor a mayor intensidad. El huracán "Ophelia" se situaba en la categoría tres en la tarde del sábado. ¿Qué quiere decir? Esta denominación conlleva que se puedan alcanzar vientos de hasta 209 km/h. Aún así, para que nos hagamos una idea, el huracán "Irma", que asoló las islas del Caribe y Florida el pasado septiembre, llegó a ser de categoría cinco.
Actualmente, "Ophelia" está provocando vientos máximos sostenidos de 160 kilómetros por hora y rachas que rozan los 200 km/h.
¿Cómo se notará en la costa gallega?
Según los pronósticos elaborados por la National Hurricane Center, el área más afectada serán las zonas marítimas del Atlántico, principalmente de alta mar, desplazándose aproximadamente a 500 kilómetros de la costa gallega hacia las islas británicas. Así todo, según la AEMET, en su último aviso especial de fenómenos adversos, el huracán se dejará sentir mañana domingo en la zona de Fisterra. Su máxima aproximación a las costas peninsulares se espera que sea entre última hora de la tarde del domingo y hasta la mañana del lunes.
Meteogalicia tiene activa la alerta por olas de entre 5 y 7 metros en toda la franja atlántica gallega. El aviso abarca entre las 3 de la madrugada de la noche del domingo al lunes hasta medianoche. Además, el departamento autonómico advierte de vientos en el mar de fuerza 7 desde la medianoche del domingo y hasta las nueve de la mañana del lunes.
En cuanto a sus efectos en tierra, la Agencia Gallega de Meteorología pronostica vientos con rachas de hasta 80 kilómetros por hora a lo largo de la madrugada del domingo al lunes en todo el oeste gallego.
Por lo tanto, en palabas de Carlos F. Balseiro, meteorólogo de 4gotas.com, pasará "lo suficientemente lejos de Galicia como para apenas notar sus consecuencias" y añade "sufriremos las consecuencias de una típica borrasca otoñal gallega (y de las flojitas)". De hecho, el pasado mes de febrero Galicia sufrió las borrascas "Kurt" y "Leiv", que alcanzaron vientos de 150 kilómetros por hora y causaron numerosos daños materiales, como por ejemplo los desperfectos en el muelle de A Guarda. Si nos remontamos a las navidades de 2013, la borrasca "Dirk" dejó vientos de hasta 190 kilómetros por hora en Carballeda de Valdeorras.
Xa está en @MeteoGalicia o boletín de avisos para o luns. Agárdase temporal no mar con sur F7-8, ondas por riba de 5 m e refachos 70-90 km/h
— MeteoGalicia (@MeteoGalicia) 14 outubro 2017
¿Por qué se producen estos huracanes?
Aunque hay muchos factores que explican la formación de los huracanes, estos nacen en aguas con temperaturas superiores a 26,5 grados y en zonas de gran profundidad (50 metros). Estos factores permiten que la atmósfera sostenga la convección de este fenómeno. De hecho, debido a estas características, se producen siempre cerca del ecuador. Allí, la diferencia de presiones y el movimiento del aire favorece que gire más rápido (como un "motor gigante", tal y como explica la NASA) para finalmente formar los célebres ojos de huracán.
Según Xataka, aunque Europa sí ha sufrido huracanes "es un fenómeno muy raro", pero añaden que estos pueden volverse "mucho más comunes" debido a la subida media de la temperatura del mar.