Ingresa en prisión el exfuncionario vigués condenado por enchufar a una cuñada de Carmela Silva

El exfuncionario Francisco Javier G.O., y el gerente de Imesapi, Ramón C.A., en el juicio tras el que fueron condenados por 'enchufar' a una cuñada de Carmela Silva en una concesionaria municipal // EUROPA PRESS

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El exfuncionario del Concello de Vigo, Francisco Javier G.O., condenado a cinco años de cárcel por prevaricación, falsedad documental y malversación (tras haber 'enchufado' a una cuñada de la teniente de alcalde Carmela Silva en una contrata municipal) ha ingresado en la prisión cántabra de El Dueso.

Según ha certificado la Audiencia Provincial de Pontevedra en una diligencia de ejecución, este órgano judicial recibió comunicación del centro penitenciario de El Dueso confirmando el ingreso voluntario del exfuncionario en dicha prisión. Así, el penado comenzará a cumplir la condena que se le impuso por parte del tribunal provincial en febrero de 2019 y que fue ratificada por el Tribunal Supremo en 2021.

A finales de 2021 el exfuncionario solicitó un indulto parcial al Ministerio de Justicia, en un trámite rodeado de polémica, porque entre las cuestiones que exponía en su petición, alegaba su militancia en el PSOE o en UGT. Además, se hizo público que numerosas entidades vecinales y culturales de Vigo habían suscrito idénticos escritos adhiriéndose a esa petición, y el PP denunció que habían sido coaccionadas por el entorno del gobierno municipal.

Transcurridos más de 12 meses desde la petición del perdón, la Audiencia la dio por desestimada y advirtió de que no se podía mantener suspendida la ejecución de la pena por más tiempo, instando al penado a ingresar en prisión. Frente a esa advertencia, la defensa de Francisco Javier G.O. presentó un recurso de súplica, que también fue desestimado recientemente.

En este proceso judicial también fue condenado el gerente de la empresa en la que fue 'enchufada' la familiar de Silva, al que se le impuso 1 año y medio de cárcel y 2 años de inhabilitación. Se trataba de una concesionaria que contrató a la cuñada de la concejal para la realización de unas encuestas, trabajo por el que cobró un total de 108.000 euros, y que nunca llegó a realizar.

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