Investigadores vigueses desarrollan un inmunoensayo para la detección ultrasensible de SARS-COV-2

Publicidad

La Universidade de Vigo continúa poniendo todo su potencial científico en la lucha contra la pandemia del coronavirus. El grupo de Química Coloidal colabora con el Sergas y el CSIC en un proyecto de la convocatoria Fondos Supera Covid para desarrollar un test LFIA que permita la identificación ultrasensible y PoC (del inglés point of care, cerca del paciente) de SARS-CoV-2.

El estudio SERS-based Lateral flow point of care immunoassay for ultrasensitive detection of SARS-CoV-2 está liderazgo por Lorena Vázquez-Iglesias y Jorge Pérez-Juste, investigadores del grupo de Química Coloidal. Participan también otros dos investigadores de este grupo (Isabel Pastoriza y Gustavo Bodelón), así como personal del Sergas, como Alberto Fernández Villar, jefe de Neumología del Hospital Álvaro Cunqueiro y profesor asociado, y Mark van Raaij del Centro Nacional de Biotecnología. Pérez Juste explica que la principal ventaja que tendría este test sería el límite de detección, es decir, haría posible “detectar cantidades de virus más bajas lo que, a su vez, permitirá detectarlo antes”.

El proyecto responde a la necesidad de implementar herramientas diagnósticas nuevas y fiables, ya que el diagnóstico precoz es especialmente importante, no solo para mejorar las posibilidades de supervivencia de los pacientes, sino también para garantizar la seguridad de la población. Los investigadores explican que “la mayoría de los tests inmunológicos para el coronavirus están centrados en la detección de anticuerpos específicos provocados durante la infección. No obstante, este enfoque solo puede detectar los anticuerpos entre 4 a 10 días después de que se habían iniciado los síntomas”. Este proyecto apuesta por emplear anticuerpos que son selectivos frente a determinadas proteínas de membrana del virus, es decir, el virus tiene en el exterior proteínas que son características y los anticuerpos lo que hacen es reconocerlas.

Una de las ocho prioridades de investigación para luchar contra el brote

Un grupo de expertos de la OMS convocado en Ginebra identificó las pruebas rápidas de PoC como la primera de las ocho prioridades de investigación para luchar contra el brote del COVID19. Pero la detección directa de componentes virales por inmunoensayos de flujo lateral (LFIAs) está comprometida por su baja sensibilidad. Como explica Pérez Juste, “en los inmunoensayos de flujo lateral estándar los anticuerpos que reconocen las proteínas van unidos la una nanopartícula (generalmente de oro como en el test en el embarazo) que es la que da lugar al color en la línea de test al acumularse. Esto hace que su límite de detección sea en cierto modo bajo, en nuestra aproximación también empleamos nanopartículas, pero estas están codificadas con ciertas moléculas que podemos detectar mediante espectroscopía SERS. Las posibilidades de esta espectroscopía en la detección son enormes dado que podría permitir detectar una única molécula”.

Así, SERSforSARS combinará biología molecular, nanotecnología y SERS para desarrollar un test LFIA para la identificación ultrasensible y PoC de SARS- CoV-2 en biofluídos nasofaríngeos, es decir, se trabajará fundamentalmente con esputo y muestras nasales.

El test permitirá detectar la presencia del virus en un tiempo similar al de los conocidos como test rápidos, “pero su fiabilidad así como el límite de detección (o cantidad mínima que se puede detectar) será menor”, resume el investigador. El proyecto cuenta con un presupuesto de 110.000 euros para un año de trabajo, un plazo que el equipo investigador considera, a priori, “totalmente factible”.

Salir de la versión móvil