Vigo sigue experimentando cambios motivados por la emergencia sanitaria del coronavirus. La ciudad olívica se va adaptando poco a poco a la "nueva normalidad". Este miércoles, Príncipe ha amanecido "tatuada". La céntrica calle viguesa ya cuenta las marcas que permiten regular el doble sentido peatonal de dirección única y mantener la distancia de seguridad de dos metros entre los usuarios que se dirigen hasta la Farola de Urzáiz y los que van en dirección a Porta do Sol.
Los trabajos de señalización arrancaron sobre las 23:00 horas de ayer. Este miércoles Príncipe ya está adaptada para esta "nueva normalidad" en la que se pretende extremar al máximo la distancia interpersonal en una de las calles más transitadas de la urbe gallega con el objetivo de frenar cualquier riesgo de contagio de COVID19. Abel Caballero señaló el pasado viernes que este sistema se instalará también en el paseo peatonal del O Calvario.
Esta medida para dirigir el sentido de los peatones se ha realizado primero en el paseo de Samil, otra de las zonas de más afluencia de la ciudad durante el verano. En el arenal vigués, el sistema cuenta con dos tipos de marcas: una que consiste en círculos de 1,5 metros de diámetros para separar la doble dirección y otra marca con “pisadas” que marcarán la dirección peatonal a los peatones. Se instala una cada nueve metros.
Con esta medida se busca evita que las personas se crucen frontalmente y caminen siempre a su derecha. El sentido único se aplica fundamentalmente en edificios cerrados con importantes flujos de usuarios, como centros comerciales o sedes de administraciones públicas.