Delegados de la CIG participaron este miércoles en acciones simultáneas en varias sucursales bancarias gallegas para denunciar el "banquete de beneficios" de la banca frente a la "subida injusta de tipos de interés" que, con circunstancia como los "salarios de miseria" están llevando a que "se extienda la pobreza" entre las clases populares.
Las acciones se desarrollaron de manera simultánea en A Coruña, Vigo, Pontevedra, Compostela, Ferrol, Lugo y Ourense y consistieron en una ocupación simbólica de distintas oficinas del Banco Santander, del BBVA y de Abanca.
El secretario general de la CIG, Paulo Carril, ha explicado que estas acciones reivindicativas se hacen en entidades financieras precisamente "porque los bancos, junto con las distribuidoras de alimentación y las empresas energéticas, representan esta fiesta de ganancias del capital". Carril ha apuntado que sólo en el primer semestre de este año, la gran banca española aumentó su beneficio un 20,2%, ganando 12.386 millones de euros.
En la crisis financiera de 2008, "la deuda pública se tradujo en recortes sociales, incremento de la pobreza y pérdida de derechos para salir al rescate de los bancos", ha denunciado la CIG. "Pero no vemos ahora que ese esfuerzo sea correspondido por las entidades, que solo se preocupan por incrementar de manera espectacular sus beneficios; es decir, por engordar más y más los dividendos que se van a repartir los accionistas", ha dicho Carril.
?En #Vigo ocupouse unha oficina do #BBVA para deixar claro que a clase traballadora non pode pagar a crise e para rexeitar o aumento imparábel dos prezos e do custe da vida mentres a gran banca segue a rexistrar inxentes beneficios pic.twitter.com/cEn8b6rwMt
— CIG (@galizaCIG) October 4, 2023
El secretario xeral de la CIG ha alertado de que las "continuas subidas" han llevado a que hoy en día "el precio del dinero esté en el tipo más alto desde septiembre de 2008 y que el coste medio de una hipoteca haya aumentado más del 15% con respecto a 2021", con Galicia a la cabeza. A esto, apostillan, se añade el "dato dramático" de que en Galicia se ha triplicado el número de personas sin hogar, y los impagos de las hipotecas registran la mayor alza desde el año 2014.
Revertir la situación
Para revertir esta situación, Carril ha reivindicado políticas de intervención pública en sectores estratégicos como el energético o el financiero, apostando por la creación de una banca pública al servicio del pueblo y de las necesidades del sector productivo.
Ha demandado, también, la congelación de las cláusulas de las hipotecas variables y que no se apliquen las revisiones a la clase trabajadora y a las clases populares mientras no bajen los tipos al mismo nivel que subieron; congelar los precios de los alquileres; y prohibir todos los desahucios de viviendas que está en marcha, extendiendo esta práctica durante 2024 y 2025.
Paulo Carril también ha criticado que la Xunta de Galicia "sea incapaz de poner en el mercado viviendas sociales un número suficiente para garantizar el acceso a una vivienda digna", mientras los precios de los alquileres "alcanzan cifras desorbitadas".