Las negociaciones entre Vitrasa y el Comité de Empresa han vuelto a saltar por los aires. Regresan los paros parciales, tal y como publicó este diario, y la situación se enquista de nuevo a un año del fin de la concesión. Los representantes de los trabajadores se han mostrado este miércoles "muy defraudados" con la postura de la dirección de la compañía comandada por Carlos González Lozano y piden al Gobierno de Abel Caballero expulsar definitivamente a la empresa del servicio de transporte público vigués.
"Además de estar perdiendo mas del 14% de poder adquisitivo y de haber dejado claro a la empresa que renunciábamos a recuperar los salarios perdidos, lo que supone un ahorro de mas de 3,5 millones de euros para Vitrasa por los años 2021 a 2023, se niegan a cerrar un acuerdo por una cantidad tan ínfima como 135.000 euros después de recibir millones", lamentan desde el comité para concluir que "Vitrasa no ha pretendido nunca solucionar este conflicto".
La compañía ofreció a los trabajadores una subida salarial del 3,1% en 2024 y del 4% anual en 2025, 2026 y 2027 y una cláusula de revisión anual del 1% en el caso de que el IPC sea superior. De esta forma, se incrementaba la subida de 2025 en medio punto sobre lo propuesto inicialmente (3,5%), pero a cambio de eliminar la prima de absentismo (sobre 350 euros por trabajador).
El Comité de Empresa acabó solicitando un incremento de 0,9% sobre la oferta realizada por la empresa para este año 2024 que fue negado por la dirección de la empresa y que puso punto final a esta mediación. "Este mínimo incremento solicitado por el Comité de Empresa supondría alrededor de 135.000 euros de desembolso cuando la última aportación del Concello de Vigo es de 12 millones de euros", explican. "Es un chantaje enfocado a que los impuestos de la ciudadanía de Vigo paguen mejoras inalcanzables", responde la concesionaria.
"Los salarios de Vitrasa siguen superando en más de un 40% el salario del convenio provincial de Pontevedra, además de tener la jornada anual laboral más baja de toda la comunidad autónoma y otras mejoras sociales", defiende Vitrasa para rechazar que se haya perdido poder adquisitivo. "Desde que Vitrasa opera el transporte urbano de la ciudad de Vigo bajo el actual contrato de 1995, los salarios subieron más del doble del IPC, subidas muy superiores al resto de convenios y a la de los empleados públicos", subrayan.
Discrepancias en las mejoras sociales
Comité y Vitrasa tampoco se han puesto de acuerdo en las mejoras de las condiciones laborales. La empresa propiedad del Grupo Avanza explica que se propuso la posibilidad de acogerse a jubilación parcial desde el 1 de enero de 2025 que "favorecería a más de 50 trabajadores en la vigencia del convenio" dando así "respuesta a una demanda histórica" y se aceptaron "mejores en los pluses de Nochebuena y Fin de Año" con "importantes mejoras en los cuadrantes de vacaciones" así como "medidas de descanso por encima de las exigencias legales".
Sin embargo, desde el comité se lamenta que se pidiera a la plantilla estar disponible las 24 horas, mientras el descanso mínimo descanso en la jornada se limitaba a 5 minutos cada 3 horas de conducción. "Son actores que empeoran notablemente las actuales condiciones del personal de conducción y que influirían negativamente en la seguridad de los viajeros", señalan.
El comité ha hecho un llamamiento al Concello de Vigo para la no renovar la concesión a esta empresa "que lo único que quiere es recortar un servicio esencial como es el transporte en una ciudad y engordar su bolsillo a costa del dinero público y de empobrecer a los trabajadores", denuncian.