La oferta pública de adquisición (OPA) hostil sobre el 100% de las acciones de Banco Sabadell lanzada este jueves por el BBVA pondría en peligro oficinas en hasta 43 municipios gallegos, donde ambos bancos disponen de sucursales. En concreto, según datos del Banco de España recopilados por Europa Press, en Galicia hay 116 sucursales del banco de origen vasco, así como 64 de la compañía catalana. En total, entre ambas entidades suman hasta 180 oficinas en la Comunidad.
De esta manera, BBVA está presente en 73 localidades gallegas, mientras que el Banco Sabadell en 45 municipios de toda Galicia, sobre todo en las provincias de A Coruña y Pontevedra. De este total, hasta 43 concellos de la Comunidad cuentan con ambas sucursales, lo que, si se produjese finalmente esta compra, podría suponer el cierre de alguna de las oficinas.
Precisamente sobre este tema ha alertado la Asociación de Usuarios de Bancos Cajas y Seguros (Adicae), quien ha lamentado que una posible fusión podría implicar un "fuerte perjuicio" para los consumidores, "que podrían ver alteradas sus condiciones y mermada la oferta de sus servicios". Por ello, la organización ha dicho estar "alerta", criticando que el "monopolio" bancario actual "frena la remuneración del ahorro" debido a la "escasez" de competencia.
Pese a todo, la cuota de mercado (en cuanto a oficinas se refiere) de la entidad resultante de la operación no superaría el 50% en ninguna de las localidades gallegas, dado el peso que otros bancos tienen en la Comunidad. Sin embargo, alcanzaría un tercio de las oficinas existentes en varios concellos como Ames (A Coruña), Baiona (Pontevedra), Betanzos (A Coruña), O Carballiño (Ourense); Noia (A Coruña); Ponteareas (Pontevedra); Sarria (Lugo); Tui (Pontevedra); Vilalba (Lugo) o Viveiro (Lugo).
Además, en algunos casos la suma de ambas entidades alcanzaría o superaría el 40% de las sucursales bancarias disponibles, como ocurriría en O Barco de Valdeorras (Ourense); en Becerreá (Lugo), donde alcanzaría el 50% de las cuatro oficinas que existen en el municipio; en Burela (Lugo); en Cambre (A Coruña); en Cedeira (A Coruña); en A Estrada (Pontevedra); en Foz (Lugo); en O Grove (Pontevedra); en Marín (Pontevedra); en Muros (A Coruña); en Ordes (A Coruña); en Ponteceso (A Coruña), o en As Pontes de García Rodríguez (A Coruña).
No obstante, las 180 oficinas de las que disponen ambos bancos en Galicia suponen un 17,7% del total de las 1.016 sucursales bancarias que existen en la Comunidad.
Al respecto, Vigo es la urbe gallega con más oficinas bancarias, hasta 113 disponibles, de las cuales 12 son del BBVA y siete del Banco Sabadell. A Coruña le sigue de cerca con 109 sucursales, siendo 13 de BBVA y siete de Sabadell. Cabe recordar que en 2013 el Banco Sabadell adquirió el Banco Gallego al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria, integrándose sus oficinas en una sola entidad, lo que le permite disponer en la actualidad de más de 60 ubicaciones en la Comunidad.
Oferta de BBVA
Todo ello después de que el consejo de administración de BBVA haya decidido este jueves formular una OPA hostil sobre el 100% de las acciones de Banco Sabadell tras el rechazo de esta entidad a una propuesta de carácter amistoso, en la que ofrece una contraprestación de una acción nueva por cada 4,83 del Sabadell, según ha informado la entidad a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
El precio equivalente de la contraprestación en efectivo es de 2,12 euros por acción de la entidad de origen catalán. El consejo de BBVA acordó igualmente la convocatoria de su junta general de accionistas para decidir acerca de la emisión de las nuevas acciones en la cuantía necesaria para atender íntegramente el canje.
La adquisición por parte de BBVA del control del Sabadell está sujeta al deber de notificación previa al Banco de España y a la obtención de la no oposición por parte del Banco Central Europeo. La semana pasada, BBVA anunció su intención de adquirir el Banco Sabadell de forma amistosa. Oferta que fue rechazada por la compañía catalana este pasado lunes. Por lo que ahora BBVA vuelve a intentarlo a través de una OPA hostil.