El servicio de la Policía Nacional va muchas veces más allá de velar por el cumplimiento de las leyes. En ocasiones, su rápida intervención marca la diferencia entre la vida y la muerte. Ese es el caso de dos situaciones vividas en los últimos días en Vigo, con actuaciones policiales que evitaron el trágico suicidio de varios vecinos en la ciudad.
En ambas situaciones varios agentes resultaron heridos al tratar de impedir que las víctimas llevaran a cabo acciones autolíticas.
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Evitaron que se arrojara al vacío
El primero de los hechos sucedió cuando los agentes, pertenecientes a la Brigada de Seguridad Ciudadana de la Comisaría de Vigo-Redondela, recibieron durante la noche un aviso por parte de la Sala CIMACC 091 en el que se daba cuenta de un posible intento autolítico.
Una vez personados en el lugar, los policías se encontraron a una mujer tumbada en el suelo y a su marido muy agitado a su lado. En medio de la intervención policial el hombre salió corriendo hacia un balcón por lo que inmediatamente los dos agentes van tras él, logrando sujetarlo por el tronco y las piernas para evitar que se arrojara al vacío.
Debido a la gran envergadura de esta persona y el ímpetu empleado para intentar ponerse nuevamente de pie, fue necesario que otros dos agentes se unieran a la maniobra de contención para impedir que se lanzara. Finalmente los agentes lograron poner a salvo a este varón, resultando dos de ellos levemente heridos. Asimismo, ambas víctimas fueron trasladadas hasta el hospital para ser atendidas.
Improvisada barricada con objetos acumulados en la puerta
Por otra parte, también agentes pertenecientes a la Brigada de Seguridad Ciudadana de la misma comisaría, fueron comisionados por la Sala CIMACC 091 para acudir a la llamada de una ciudadana en la que se pone de manifiesto la intención de un hombre de acabar con su vida.
Al parecer esta persona se encontraba encerrada en una nave industrial en Vigo, por lo que los policías solicitan la ayuda de los bomberos para poder acceder al interior. Tras lograr introducirse dentro, una vez superada una improvisada barricada construida por el hombre con objetos acumulados en la puerta, los agentes fueron amenazados y agredidos por esta persona, por lo que tuvieron que activar el inmovilizador eléctrico de control en dos ocasiones, sin que finalmente se llegase a realizar descarga eléctrica alguna sobre el sujeto.
Los agentes lograron reducir a esta persona, a pesar de su resistencia, y fue trasladado por el servicio sanitario hasta el hospital. Asimismo fue localizada en el interior de la nave una soga colgada de un puente grúa. También en esta actuación uno de los policías resultó herido.
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