El Consello de la Xunta ha aprobado este jueves el decreto que modifica las normas de habitabilidad de Galicia del año 2010 para facilitar que los propietarios pueda convertir bajos comerciales y entreplantas abandonadas o sin actividad en viviendas. De ello ha informado el máximo mandatario autonómico en la rueda de prensa posterior a la reunión semanal de su Gobierno, una comparecencia en la que ha tomado la palabra la vicepresidenta segunda y conselleira de Medio Ambiente, Territorio e Vivenda, Ángeles Vázquez, para desgranar los detalles de esta norma.
Rueda ha destacado que "no se trata de eliminar comercios" para "sustituirlos por viviendas", sino de "facilitar que los bajos en los que hay "muy pocas posibilidades de que puedan ser utilizados como comercios" no sigan vacíos y que tengan la posibilidad de una "segunda utilización", especialmente en "lugares donde esté subiendo el precio del alquiler" para que el aumento de la oferta contribuya a una bajada de precios.
Por su parte, Ángeles Vázquez ha señalado que la patronal cifra en unos 7.000 los bajos que en estos momentos se ofertan en alquiler con "pocos visos de futuro como comercio", una cifra a la que se deben añadir los que no están en las inmobiliarias pero a los que sus propietarios les gustaría dar "otro uso". De los 7.000 que estima el sector inmobiliario, 2.000 ya cumplirían los nuevos requisitos de la Xunta.
El cambio más relevante introducido con este decreto, ha indicado la Xunta, es el de favorecer o facilitar la reconversión de bajos en viviendas, permitiendo a los ayuntamientos hacer excepciones y simplificar las exigencias necesarias para garantizar la intimidad de los residentes en determinados ámbitos, siempre que esté debidamente justificado por razones urbanísticas o de protección patrimonial de la zona.
A tal fin, se mantiene con carácter general la exigencia de protección de vistas en las viviendas resultantes de la reconversión de locales comerciales en planta baja, pero serán las administraciones municipales las que puedan delimitar ciertos ámbitos en los que se exima del cumplimiento de estos requisitos, o bien se maticen para que resulten más fáciles de cumplir, mediante la tramitación de un anexo de habitabilidad.
En la práctica, por ejemplo, esto posibilitará que bajos con una altura de 2,5 metros puedan transformarse en viviendas cuando antes se requería un mínimo de 3,2 metros. Asimismo, se flexibilizarán las condiciones que debe cumplir una vivienda para ser considerada exterior. Con el cambio aprobado, facilitando la delimitación de los tipos e espacios exteriores a los que se deben abrir las viviendas para tener tal condición, al permitir a los ayuntamientos definir cuáles son estas zonas sin necesidad de acometer una modificación de su planificación urbanística.
En el caso concreto de las viviendas localizadas en cascos históricos, antes se exigía que dos de las habitaciones principales (salón y dormitorios) tuviesen salida al exterior pero, a partir de ahora, la segunda estancia exterior podrá ser también la cocina. Además, el diámetro mínimo establecido para que los patios de manzana computen como zonas exteriores de calidad se reduce de 0,7 metros a 0,5.
La vicepresidenta segunda ha sostenido que este decreto es fruto "del consenso" y que ha contado con un "amplio respaldo", tanto de propietarios como del sector. Tras recibir este jueves el visto bueno del Consello, el documento entrará en vigor al día siguiente de su publicación en el Diario Oficial de Galicia (DOG).