El vicepresidente primero de la Xunta de Galicia, Alfonso Rueda, avanzó esta mañana la posibilidad de que el comité clínico endurezca las medidas vigentes para frenar las “cifras muy preocupantes” de contagios en Galicia. Con todo, Rueda expresó que la intención del Gobierno gallego es la de “compatibilizar las medidas sanitarias con la vida económica, que en estos meses de verano se refiere especialmente al sector turístico y hostelero”.
Así, el principal objetivo del Gobierno gallego será “incidir” en las reuniones entre personas no convivientes. Preocupan especialmente las reuniones fuera de los locales de hostelería, como en la calle y en domicilios particulares, donde el cumplimiento de las normas se vuelve más laxo. Así, aunque habrá que esperar “a ver lo que acuerda el comité clínico”, Rueda se muestra proclive a “plantear al menos una limitación del número máximo de personas que se pueden reunir” haciendo hincapié “a partir de determinadas horas”.
Con todo, el vicepresidente primero es consciente de la imposibilidad de controlar todas las reuniones que se dan en espacios privados, por lo que pide a los gallegos y gallegas “prudencia” ya que el mejor control “es la propia autorregulación y ver las consecuencias de no hacerlo”.
En relación a la posibilidad de aplicar nuevas medidas en la hostelería, Rueda aseguró que “si hubiera que añadir nuevos requisitos irían en aras de aumentar la seguridad sanitaria y permitir que sigan funcionando, aunque sea con más requisitos”. Aunque no se dieron ejemplos, una posibilidad podría ser la de solicitar test negativo o certificado de vacunación para disfrutar de determinados espacios en restaurantes, tal y como ya sucede en Portugal. Con todo, “aunque aumentaran los requisitos para acceder a espacios de hostelería” el Gobierno gallego maximizará el objetivo de “intentar que puedan seguir funcionando porque lo que no queremos es tener que cerrarlos”.
Existe, eso sí, la posibilidad de que la Xunta deba pedir autorización al Tribunal Superior de Xustiza de Galicia (TSXG) para poder aplicar alguna de las medidas que hoy se aprueben -y que no se conocerán hasta mañana- ya que “no tenemos una ley de pandemias tal y como reclamamos las comunidades autónomas”, criticó.