El grupo municipal del PP de Vigo denunció el pasado lunes que las quejas formalizadas en el teléfono 010 se han triplicado desde que la concesionaria inició su plan de recortes en el transporte público municipal con el “consentimiento” de Abel Caballero. Tal y como ha expuesto el concejal Miguel Martín, el servicio de atención a la ciudadanía recogió 1.353 quejas durante el último lustro, es decir, entre 2019 y 2023, ambos inclusive. Un dato que se acerca mucho al registrado en los quince años anteriores: 1.575.
Las estadísticas son, si cabe, más “sangrantes” si se pone el foco únicamente en 2023. Ese año se contabilizaron 519 quejas, lo que multiplica por cinco la media anual, que estaba en 160.
Hay que tener en cuenta que estas cifras “son solo la punta del iceberg del descontento de los vigueses con este servicio público”, ya que únicamente contemplan las denuncias presentadas oficialmente. A ellas hay que sumar las que se producen a diario pero no se registran. Una situación que “debería hacer actuar al Gobierno de Abel Caballero, en vez de escurrir el bulto y lavarse las manos ante un problema que le atañe directamente y del que es tan responsable como la propia empresa”, remarca Martín.
Por ello, el Partido Popular de Vigo ha exigido al Gobierno socialista que “asuma su responsabilidad” y “atienda las demandas de los vigueses al respecto del creciente malestar por el servicio que presta Vitrasa en esta ciudad”.
Martín ha subrayado que el servicio es “manifiestamente deficiente” pese a ser uno de los más caros de España, como constató la OCU. La tarifa ordinaria ha subido este lunes a 1,57 euros. Se trata de un incremento de un 5,3%. Un aumento, por tanto, superior al IPC. De este modo, ya es más caro moverse en autobús dentro de la ciudad que salir de ella. Sirva como ejemplo que el billete para ir de Vigo a Nigrán cuesta 1,55 euros.
“El señor Cabalero únicamente ha sido diligente en subir año tras año el billete del autobús urbano, incluida la Pass Vigo, mientras que mira para otro lado y permite a Vitrasa llevar adelante un plan de eliminación de rutas y autobuses que cada día que pasa hace que los vigueses tengamos un peor servicio y aún por encima más caro que nunca”, prosigue Martín.
Mientras todo esto ocurre, tal y como señala el PP de Vigo, en la calle hay 15 autobuses menos y se han suprimido 400 viajes a la semana. “Y esto sin contar la huelga indefinida que vive el transporte público y que sufrimos todos los vigueses”, concluye el edil popular.