La Xunta de Galicia, a través de la empresa pública Sogama, ha licitado esta semana por casi 2 millones de euros las obras de mejora y adaptación de la planta de transferencia de residuos de Vigo, localizada en Guixar, para que pueda recibir la fracción orgánica recogida de forma diferenciada mediante los nuevos contenedores marrones (orgánico).
Así, los trabajos prevén la construcción de una tolva para la transferencia de los llamados biorresiduos, así como la sustitución de la envolvente del conjunto de la nave, para aumentar el nivel de aislamiento acústico y mejorar su integración en el entorno.
Una vez concluida la obra, la instalación pasará a formar parte de la red pública de infraestructuras para la valorización de la materia orgánica, que fue diseñada por la Xunta y ejecutada por Sogama. "El objetivo de esta iniciativa es ayudar a los ayuntamientos, que son quien tiene las competencias en materia de residuos, a cumplir con la legislación vigente y facilitar así la conversión de los biorresiduos de origen doméstica en compost, un abono natural de alta calidad que podrá ser utilizado en el ámbito de la agricultura y de la jardinería", ha reivindicado el Gobierno gallego.
El plazo de ejecución de los trabajos será de un máximo de siete meses, contando a partir de la fecha de acta de inicio de obras.