Vigo no quiere renunciar a su Navidad. “España va a ver la luz de la Navidad de Vigo”, sentenció esta mañana el regidor vigués en relación al futuro incierto de unas celebraciones que están cada vez más en duda ante la negativa evolución de los contagios de coronavirus. El Concello sigue adelante con su plan de ruta y asegura que la seguridad estará garantizada “al mil por cien”. Más allá de medidas ya anunciadas, como la peatonalización de “prácticamente todo el centro de la ciudad”, Caballero avanzó esta mañana nuevos detalles sobre el plan de seguridad.
Para garantizar la distancia interpersonal en la Navidad de Vigo, el Concello ha iniciado ya la contratación de cámaras que permitan controlar el aforo. Se instalarán en aquellas calles donde haya mayor atracción de visitantes, como Policarpo Sanz, Príncipe o Colón. Estas vías estarán cortadas y contarán con puntos de entrada y salida controlados por la Policía Local, según promete el regidor vigués. Un semáforo indicará si es posible entrar (en color verde) o el aforo ha llegado a su máximo (color rojo) y no se permite el acceso. Para controlar las aglomeraciones en los accesos, Caballero asegura que “habrá colas con lugares marcados”.
Otra de las grandes novedades llegará con la Cabalgata de Reyes de 2021. Por primera vez, la comitiva real no se desplazará por buena parte de la ciudad sino que estará “estática”, parada en una calle todavía por desvelar. Se convertirá más en un espectáculo más próximo al teatro que a una Cabalgata. Se creará un pasillo por el que padres, madres y niños y niñas podrán ir desfilando para recorrer todas las carrozas que componen la comitiva de Sus Majestades de Oriente.
Por otro lado, Abel Caballero señaló que también habrá importantes cambios en otros eventos de la Navidad de Vigo como el acto del encendido. La intención del Concello es que la cita se haga con aforo de 400 personas, que estarán sentadas para poder garantizar la distancia de seguridad interpersonal. No obstante, el regidor vigués desveló que desde Praza do Rei manejan otras alternativas por si la situación sanitaria se complica en la ciudad olívica. Este "plan B" supondría la retransmisión del encendido del alumbrado navideño a través de la televisión y el streaming sin público presencial. "Si la gente no puede venir, iremos nosotros allí", apuntó.
El alcalde de la urbe gallega puso de ejemplo el modelo de cuadrículas diseñado para las playas de Samil y O Vao como apuesta de un modelo de seguridad sanitaria ante la pandemia. "Hubo cero contagios. Se transgredió la distancia cero veces. Algo que era impensable lo hicimos", destacó el regidor vigués.
