Novedad en la designación de las sedes de España que acogerán el Mundial de Fútbol 2030. Menos de 24 horas después de que la Real Federación Española de Fútbol (RFEF) hiciera oficial los estadios propuestos a la FIFA que albergarán el torneo mundialista -descartando a Balaídos y apostando por Riazor-, el Deportivo ha emitido un duro comunicado en el que expresa sus dudas sobre la ampliación del aforo del estadio municipal coruñés. En la nota lanzada a primera hora del sábado, la entidad que preside el máximo responsable de Abanca, Juan Carlos Escotet, indica que su prioridad es mantener el estadio con una capacidad de 32.471 localidades, "acorde al tamaño de nuestros abonados y que asegure el presupuesto necesario para confeccionar nuestros cuadros y las inversiones destinadas al desarrollo y crecimiento de la entidad.
El Deportivo afirma que "no pondrá en riesgo la sostenibilidad del club" por la "aventura" de ser sede de la Copa del Mundo, algo de lo que "nunca" han sido ni partícipes ni consultados. El enfrentamiento con el Gobierno coruñés que lidera Inés Rey es total, al que acusan de que su comportamiento "no es institucional ni pertinente" e insta a las autoridades a "avanzar hacia un diálogo basado en el respeto mutuo". Por ello, este sábado no habrá ningún miembro del club coruñés en la presentación del proyecto de A Coruña como sede del Mundial de Fútbol 2030.
La entidad herculina muestra su cabreo por el "poco tiempo de preaviso" en el que recibieron la invitación de la alcaldesa de A Coruña, Inés Rey, para participar en el acto de este sábado y denuncia que el "Deportivo nunca participó ni recibió ninguna información acerca de las gestiones mantenidas por los diferentes estamentos" para albergar el Mundial de Fútbol 2030.
En cuanto a la ampliación de aforo de Riazor, un requisito clave para poder ser sede del Mundial de Fútbol 2030, el Deportivo destaca que está comprometido a realizar las inversiones realizadas en el estadio "de forma progresiva", pero siempre de acuerdo a las necesidades del equipo, cuya prioridad es mantener esa capacidad en las cerca de 32.500 butacas. No obstante, indica que el objetivo del club es tener un estadio categoría 4 de la UEFA, llegado el momento de disputar competiciones europeas y reitera que "asumirá de forma prudente" las mejoras necesarias que haya que llevar a cabo en el estadio de Riazor en cada categoría y siempre de acuerdo a lo establecido en el contrato de arrendamiento firmado con el Concello.