Nueva imagen para la nueva Porta do Sol, aunque sea, en uno de los casos, solo algo temporal. La reformada plaza viguesa, cuyas obras encaran ya la recta final, se prepara para la procesión religiosa del Cristo de la Victoria del próximo domingo con algunas de las novedades que permanecerán una vez finalicen unas obras que se han prolongado ya durante dos años y medio en pleno centro de la ciudad.
Aunque los operarios metieron la sexta marcha para avanzar lo más rápido posible, la plaza no estará finalizada para este domingo, tal y como se había avanzado inicialmente. De hecho, en una de las zonas ni tan siquiera se ha instalado el nuevo enlosado de piedra y, en su lugar, se ha cubierto la zona de cemento para permitir el paso de personas de forma temporal.
Tampoco han finalizado las tareas de construcción del nuevo escenario para eventos, ubicado en el extremo hacia Policarpo Sanz tras la salida del túnel. Ese espacio continuará vallado y ahí, el Concello ha situado las enormes macetas con plantas que habitualmente se encuentran en Príncipe y que se han retirado para facilitar el paso de la procesión.
Lo que no será temporal son las nuevas farolas que estrena la plaza. Ubicadas en los extremos laterales, cuentan con diferentes focos que, además de dar luz durante la noche, permitirán iluminar la plaza en diferentes tonalidades en función de los eventos que se desarrollen en ella a través de luces led.
Una vez pase el domingo, las obras continuarán. Ni el escenario ni la zona más próxima a Príncipe está finalizada. Por ahora tampoco han aparecido los cuatro árboles previstos en ese espacio, ni las zonas ajardinas proyectadas en la parte alta. Falta también la instalación de bancos y fuentes, así como aparcabicis y otros elementos de mobiliario urbano.
La actuación en la plaza de 8.000 metros cuadrados se completará con la instalación de una rampa mecánica en la calle Carral que permita conectar con el eje de las escaleras mecánicas de Segunda República, cuyas obras también continúan.
Las obras deberían haber finalizado hace meses, pero diferentes problemas en el proyecto así como la irrupción de la pandemia han retrasado la inauguración al segundo semestre de 2022. Se engloban en el proyecto de soterramiento del tráfico rodado, y la actuación fue adjudicada por 13,4 millones de euros a la UTE formada por Civis Global y Gevora Construccións. Las obras están cofinanciadas por la Unión Europea a través de fondos Feder del proyecto Edusi Vigo Vertical.
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