Sorpresa entre las personas que transitaban a primera hora de la tarde por las rampas de la Gran Vía. Uno de los tramos del corredor vertical estaba esta tarde precintado por la Policía Local. La prohibición para acceder a esta parte del elemento mecánico afectaba a toda la zona aporticada. ¿El motivo? Tal y como pudo saber este diario, fuentes municipales señalan que el área ha sido cortada a los peatones "por motivos de seguridad" al estallar uno de los cristales.
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Esta no es la primera vez que un tramo de las rampas de Gran Vía se cierran a uso peatonal debido a un episodio de estas características. A finales de mayo de 2022, un vidrio que estalló en otro tramo del elemento mecánico provocó que se clausurase una zona también por motivos de seguridad ante el riesgo de que estallase y pudiera caer encima de algún viandante.
Fuentes municipales señalaban en la tarde de este lunes a Metropolitano.gal que operarios del Concello "ya están trabajando" para reponer el cristal estropeado para que el funcionamiento en una de las infraestructuras más representativas y utilizadas del proyecto municipal del Vigo Vertical funcionen con total normalidad.
Con este contratiempo, vigueses y visitantes que subían la Gran Vía hacia Praza de España han tenido que hacer algo de esfuerzo y luchar contra el calor que hace en la jornada de este lunes en Vigo. La medida adoptada por el Concello de precintar este tramo de la zona aporticada afecta tanto a la cinta mecánica como al área peatonal, por lo que el acceso peatonal está totalmente cortado en este tramo del bulevar situado en pleno corazón de la urbe gallega.