La huelga del sector del transporte de viajeros en autobús por carretera se ha secundado de una forma "masiva" por parte de los trabajadores en las cuatro provincias gallegas, según los sindicatos que convocan el paro. En declaraciones a Europa Press, los representantes de CIG, UGT y CC.OO. sitúan el dato de seguimiento por encima del 90% y aseguran que "roza" el 100% en algunos casos.
Por su parte, el portavoz de la Federación Gallega de Transportes (Fegatramer), Carlos García Cumplido, apunta que "discurre con normalidad", si bien en las ciudades se han bloqueado las salidas, en particular las estaciones y "no permitieron dar cumplimiento ni a los servicios mínimos".
La huelga afecta al transporte interurbano, al metropolitano, a los servicios escolares y a cercanías, así como al urbano de Santiago y Lugo, donde se rigen por los convenios provinciales. Además, en la ciudad de Vigo, en la que este viernes empieza el fin de semana 'grande' de la Reconquista, coincide con la huelga de la concesionaria del bus urbano, Vitrasa.
"Non á precariedade"
Las plantillas, que se han concentrado este viernes en las terminales de varias ciudades con pancartas con lemas como 'por un convenio xusto' y en contra de la 'precariedade', reclaman, entre otras cuestiones, negociar los cuatro convenios y las tablas salariales, que, según apuntan, llevan sin actualizar dos años en el caso de A Coruña y Pontevedra y cinco en el de Lugo y Ourense.
En este escenario, los sindicatos subrayan que ahora, pasada Semana Santa, la patronal deberá "sentarse de verdad". "Estábamos negociando el IPC para A Coruña y Lugo y la oferta era del 0,8%. Esto es imposible. Y en Lugo y Ourense ni siquiera había negociación", ha criticado, por su parte, el portavoz del sector en UGT-Galicia, Miguel Campos, en la concentración convocada en la estación de Santiago.
El responsable del sector de la CIG en la comarca de Vigo, Carlos Lamosa, ha señalado que la jornada de huelga es resultado de la actitud de una patronal "inmovilista", que mantiene salarios base por debajo de los 1.000 euros y que, para actualizar las nóminas, ofrece "un irrisorio +0,8%". "Se ríe de los trabajadores", ha concluido.
Por parte de la CIG, en la concentración de Santiago, Nacho Pavón ha incidido en que los servicios mínimos "impuestos" por la Xunta eran "abusivos" y señala que algunos de ellos no salieron. De hecho, no han funcionado en algunos colegios ni tampoco en otros casos el transporte de funcionarios de la Xunta a Santiago.
Paro indefinido
Mientras, Raúl Rodríguez, de CC.OO. Galicia, no descarta que, llegado el momento, el sector reedite un escenario como el vivido durante el año 2017, cuando el paro fue indefinido y el conflicto se prolongó durante varias semanas. "La administración responsable aquí es la Xunta, que tiene que mover ficha", advierte Campos, después de trasladar las disculpas por los "daños causados" a los usuarios, que este viernes de comienzo de la Semana Santa se han encontrado con la huelga a primera hora de la mañana.
En la misma línea, Benigno Caride, representante de CC.OO. en el sector en la comarca de Vigo, ha advertido de que si no hay movimientos por parte de las empresas o de la Xunta, "terminará habiendo huelga indefinida", y ha subrayado que "hay motivos más que suficientes" para la protesta, debido a los salarios "en el umbral de la pobreza", con jornadas "de 12:00 y 13:00 horas".
Además, ha apuntado que el problema tiene su origen en las "ofertas temerarias" de las grandes empresas para lograr adjudicaciones de líneas por parte de la administración, "luego las cuentas no salen y pretenden repercutir en los sueldos de los trabajadores lo que hicieron mal". Las tres organizaciones convocantes apuntan a una jornada "sin incidencias" y a un "éxito rotundo", si bien Ourense ha registrado alguna incidencia como las ruedas pinchadas de autobuses en Trives y petardos lanzados en la capital de la provincia.
Viajeros afectados
La sensación en las estaciones de autobús gallegas entre los viajeros era de desconcierto, ya que muchos de ellos desconocían la convocatoria de huelga, especialmente aquellos usuarios procedentes de fuera de la comunidad. Aunque ha habido menos movimiento en las terminales, en algunos puntos, como la estación intermodal de Vigo, ha habido momentos de cola ante los mostradores de información de las compañías.
Así, en la ciudad olívica, fueron varios los viajeros que se concentraron a la espera de poder tomar un autobús con destino a Oporto, como el caso de Gustavo, un viajero que debía llegar a mediodía al aeropuerto Sá Carneiro para tomar un vuelo a Maastricht (Países Bajos). "Creo que voy a llegar justo, con la suerte de que no tengo que facturar, si no, sería imposible", ha apuntado.
Del mismo modo, Emely, estudiante de Erasmus que reside ahora en Vigo, se ha visto sorprendida por la huelga, y sus planes de pasar el día en Oporto han quedado afectados, como los de Raúl que, junto a su mujer y su hijo se ha quedado sin bus a Ponteareas, y estaba valorando tomar un taxi. "Es que no tenía ni idea de la huelga, pero un taxi me costará más del doble", ha lamentado. La huelga también ha provocado un trasvase de afluencia de las estaciones de autobús a las de ferrocarril, si bien lo extendido que está el uso de los abonos gratuitos para viajeros recurrentes por parte de Renfe hace que los trenes tengan agotadas sus plazas desde hace días.