El Gobierno gallego ha analizado este jueves en su reunión semanal un proyecto de decreto que buscará incentivar y promover que más profesionales del Servizo Galego de Saúde (Sergas) accedan a ser tutores de la formación sanitaria especializada, es decir, de los médicos internos residentes (MIR) y enfermeros internos residentes (EIR), entre otros.
Entre las medidas que incluirá este texto, que la Xunta confía que entre en vigor a partir de mayo, con la nueva convocatoria, están dar mayor puntuación en procesos selectivos y concursos de traslados, garantizar que sus agendas tendrán tiempo reservado para esta labor de tutorización y, en el caso de la especialidad de Medicina Familiar y Comunitaria, la posibilidad de alcanzar en menor tiempo nuevos grados en la carrera profesional --lo que se traduce en mayores retribuciones--.
Tras la reunión del Gobierno gallego, su presidente, Alfonso Rueda, ha comparecido para informar de este decreto, aunque los detalles los ha facilitado el conselleiro de Sanidade, Julio García Comesaña, quien ha aprovechado para volver a solicitar al Ministerio de Sanidad que flexibilice los criterios para que más centros sanitarios puedan contar con profesionales en formación.
Galicia cuenta, de acuerdo con datos que ha ofrecido el conselleiro, con casi 900 tutores de residentes de todas las especialidades, de los que 350 están en Medicina de Familia, "muchos" de ellos en edad próxima a la jubilación que ahora Sanidade buscará retener.
Comesaña ha asegurado que hay "un problema importante de tutores, sobre todo para Atención Primaria", más aún teniendo en cuenta que la oferta gallega de plazas en Medicina de Familia será de 207 --la totalidad de las acreditadas por el Gobierno central en esta especialidad-- de las 620 que habrá para todas las categorías.
"Una de las normas más importantes"
Por eso, este decreto es "una de las normas más importantes de la legislatura", en palabras del titular de Sanidade. Tras ser revisado este jueves por el Consello, se someterá al dictamen del Consello Consultivo antes de su aprobación definitiva.
El eje principal del texto es la creación de un estatuto del tutor que incluirá las medidas específicas para este colectivo. Entre ellas, está también un programa específico de formación para tutores, así como su priorización en aquellas otras actividades de formación del personal que planifique el Sergas.
En el caso de procedimientos selectivos, el decreto garantiza que los profesionales que ejerzan las tutorías reciban puntuación adicional e, incluso, se les pueda reservar plazas específicas en aquellos centros que estén acreditados para la formación MIR.
Asimismo, el decreto incluye otras medidas de carácter organizativo, como definir las estructuras sanitarias docentes, otorgar el nivel de jefatura de servicio a los jefes de estudios y crear la figura del tutor de apoyo para las unidades que reciban un número importante de residentes en rotación, como las Urgencias.
El conselleiro de Sanidade ha destacado el proceso "muy participativo" que supuso la tramitación del texto, en la que intervinieron comisiones de docencia, sociedades científicas, colegios profesionales y sindicatos, entre otros colectivos.
Niega "problema de condiciones laborales"
A preguntas de los medios sobre las plazas MIR que quedaron vacantes, el conselleiro de Sanidade ha descartado que sea un "problema de las condiciones" laborales, sino que es del sistema de elección. "Antes de la pandemia se hacía de forma presencial y un aspirante podía ver todas las plazas disponibles con la irrupción de la pandemia", ha explicado.
En total, quedaron unas 200 plazas "sin escoger", ha detallado Comesaña, nueve de ellas "en Galicia solo". "Pero en Cataluña, que hizo un esfuerzo muy grande económico en retribución, fue donde quedaron más sin escoger, lo que confirma que no fue un problema de características de las plazas sino del sistema", ha añadido.