La Fiscalía pide penas que suman 9 años de prisión para un hombre acusado de un delito de estafa agravada y un delito continuado de estafa, por haber engañado a varias personas para enriquecerse ilícitamente, y de las que consiguió obtener casi 93.000 euros. El hombre será juzgado este miércoles en la sección quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, con sede en Vigo.
Según el escrito de acusación pública, este hombre (con condenas anteriores por estafa en Cantabria y Cataluña) inició una relación sentimental en abril de 2018 con la titular de una farmacia de A Guarda. Ante ella, se presentó como una persona con enormes posibilidades económicas, herencias, viúdo y con una hija estudiando en un internado de Londres, y asegurando que era director de Ingeniería de Apple.
Cuando se había ganado la confianza y el cariño de la víctima, empezó a pedirle dinero con diversas excusas, que la mujer le entregó creyendo que se lo devolvería.
Así, en los meses siguientes, la mujer le transfirió 6.000 euros para una reparación del coche del acusado; 2.000 euros, después de que le propusiera irse a vivir con él a un chalé que había alquilado; otros 12.379 euros para la supuesta adquisición de un lote de productos de Apple que él conseguiría a buen precio, dada su presunta condición de directivo de la compañía; 1.750 euros para la matrícula de su hija en el centro de Londres; o 53.000 euros para las gestiones de cancelación de una falsa hipoteca de un inmueble de Londres.
Otros gastos
Asimismo, según la Fiscalía, el acusado entregó el vehículo de la mujer para comprar otros dos coches (por 18.000 y 22.500 euros respectivamente), uno de los cuales le aseguró que pondría a su nombre, pero nunca cumplió su palabra y lo vendió a un tercero.
A esto se suman otras dos transferencias que el acusado se hizo a sí mismo por valor de 1.940 euros, y la contratación de una tarjeta bancaria sin autorización de la titular de la cuenta, que era la farmacéutica. De hecho, la víctima se enteró de esta gestión cuando recibió un aviso del banco por el impago de la tarjeta.
Cuando la mujer le reclamó la devolución de su dinero, el acusado elaboró unos documentos falsos, que simulaban ser comprobantes de transferencias del BBVA y que sumaban 65.000 euros, pero esas transferencias no existieron. Del mismo modo, mostró tanto a la mujer como al arrendador del chalé donde vivían varias nóminas falsas. La relación la víctima finalizó en abril de 2019, cuando el acusado le anunció que abandonaba el chalé y que estaría un tiempo fuera, ilocalizable, "para desconectar".
Nuevas víctimas
Paralelamente, el acusado también engañó a otras personas, ante las que también se presentó como alto directivo de Apple, 'marido' de la farmacéutica de A Guarda, y dueño de un chalé en Oia.
El procesado se ganó la confianza de un matrimonio propietario de una cafetería, y le hizo creer que, como ejecutivo de Apple, podría conseguir un lote de productos de esta marca a muy buen precio, que podría vender con un alto beneficio. Así, consiguió que le entregaran 13.480 euros.
El supuesto estafador fue más allá y, alegando que otro directivo de la empresa había dejado 'libre' otro lote, se lo ofreció a una hija del matrimonio, a cambio de otros 13.480 euros. Posteriormente, mostró a las víctimas justificantes falsos del dinero entregado y de otros 9.000 euros de supuestos beneficios por la venta de cada lote, pero ninguno recuperó ninguna cantidad.
Del mismo modo, logró engañar a varias personas más, a las que ofrecía teléfonos, portátiles y otros productos, entre ellos al responsable de una tienda de tecnología. Ninguno recibió la mercancía ni recuperó su dinero.
Delitos y penas
En relación a la estafa de la que fue víctima la farmacéutica, la Fiscalía considera al acusado autor de un delito de estafa agravada, en concurso con un delito de falsedad en documento mercantil. Por el resto de hechos, lo acusa de un delito continuado de estafa, con la agravante de reincidencia.
Así, pide que sea condenado a un total de 9 años de prisión, y al pago de una multa de 7.200 euros. Del mismo modo, reclama que indemnice a la farmacéutica de A Guarda en más de 76.400 euros, más los gastos por la compraventa de los coches; y que devuelva el dinero estafado al resto de víctimas, hasta un total de casi 93.000 euros.