Cualquiera que pasee por Porta do Sol coincidirá en que los edificios de su alrededor contribuyen a crear un escenario único. El centro neurálgico de la ciudad olívica se caracteriza por las vistas a las históricos fachadas. Uno de estos edificios, ubicado a tan solo unos pocos metros de esta céntrica plaza, se encuentra ahora a punto de empezar una segunda vida después de casi una década abandonado.
De esta forma, el Concello de Vigo aprobó la licencia para el vaciado de un edificio ubicado en el centro de la ciudad olívica. Se trata del número 7 de la calle Policarpo Sanz, que permanece congelado en el tiempo mientras su alrededor ha ido avanzando a golpe de humanizaciones y peatonalizaciones.
El edificio, en su origen, contaba con dos semisótanos, una planta baja con entreplanta, una primera planta y una cubierta. Un total de 964,72 metros cuadrados que ahora mismo se están desvaneciendo para iniciar un nuevo camino.
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Un pasado con historia
Las obras en este edificio ya han comenzado, y su demolición cuenta con un presupuesto de 35.001 euros. Estos trabajos no incluyen la construcción de lo que será finalmente el número 7 de Policarpo Sanz.
Sí se puede confiar en que, por lo menos, su rostro seguirá manteniendo la imagen que imprime su fecha de construcción. Con más de cien años, fue alzado en 1890, Patrimonio protege su fachada y no podrá ser también demolida. Aunque sí renovada, por lo que los vigueses y viguesas enamorados de su arquitectura no deberán temer por su imagen frontal.
Algunos puede que todavía recuerden que el local que se encontraba en esta ubicación se trataba de las Tres BBB, una tienda de ropa con mucha historia en la ciudad olívica. Ahora, queda descubrir en qué se convertirá este local una vez terminadas las obras.