Nuevos ataques a la flota de Vitrasa que “un proyectil casi alcanzan a un viajero”. La concesionaria del transporte urbano de Vigo ha comunicado este miércoles nuevos actos vandálicos a sus autobuses, con cuatro ataques sufridos en las primeras horas de la mañana de este 10 de enero.
El conflicto laboral entre los trabajadores de Vitrasa y la empresa se mantiene en auge, tras casi 50 días de huelga indefinida en el transporte urbano de la ciudad olívica y varios años de protestas y movilizaciones. Este miércoles el comité enviaba un comunicado arremetiendo duramente contra el Gobierno de Vigo y la compañía responsable de los autobuses en el que acusaban de “algo moi turbo nas relación entre ambos e todas as manobras que está a realizar el Concello”, indicaban.
Por su parte, Vitrasa ha informado este miércoles que cuatro de sus autobuses ha sufrido ataques a primera hora de la mañana, en uno de ellos había un usuario a bordo “que apunto estivo de ser alcanzado por el proyectil”, afirman desde la empresa. Así, los actos vandálicos contra la flora de la concesionaria del transporte urbano de Vigo “suman un coste de alrededor de 27.000 euros desde el comienzo de la huelga”, el pasado 25 de noviembre, según indican en el comunicado.
El primero de los ataques a los autobuses tuvo lugar a las 06:00 horas en la línea 15C a su paso por la rúa das Plantas. “El conductor sintió un ruido de un objeto que impactó contra la ventana lateral, rompiéndola”, indica Vitrasa. El siguiente acto violento se dio a las 06:50 horas en bus de la línea 10 a su paso por la carretera de Camposancos, dirección Saiáns y también se saldó con una ventana lateral rota. Otro ataque fue a las 07:33 horas, en Cesáreo Vázquez dirección Saiáns, donde un bus de la línea 11 recibió el impacto de una piedra que provocó la rotura de una ventana lateral. En estos tres casos no había ningún viajero a bordo, según indica la empresa.
Un minuto antes de este último ataque, y en la misma ubicación, tenía lugar el acto violento contra un autocar de la línea 10. En este caso, el ataque se realizó con un proyectil, “estilo balín de acero, que ya se tiene utilizado en otras ocasiones”, según indica Vitrasa, y que en esta ocasión atravesó una ventana lateral. El comunicado de la empresa de autobuses indica que “en ese lugar iba sentado un viajero que hacia escasos minutos se levantara para disponerse a bajar del autobús, si no lo llega a hacer, el proyectil lo hubiese alcanzado”, aseguran.
Se mantienen así los actos vandálicos contra la flota de Vitrasa, que desde principios de 2023 contabiliza un coste estimado de 42.000 euros. “Solicitamos encarecidamente que ceses estas actuaciones violentas que suponen una amenizada para la ciudadanía y los conductores”, piden desde la empresa, después de que durante el pasado mes de diciembre dos conductores tuviesen que acudir a urgencias tras sendos ataques a los autobuses.