La enfermera de Reanimación Cardíaca Postcirúrxica del Álvaro Cunqueiro, Sheila Senra Alonso, ha ganado un premio nacional de enfermería en el Congreso de Reanimación de Málaga, por un trabajo sobre el Plan de Cuidados a los pacientes con soporte hemodinámico mediante ECMO, membrana de oxigenación extracorpórea.
El ECMO es una terapia de circulación por membrana extracorpórea muy utilizada en las Unidades de críticos. Se trata de un equipamiento técnico que realiza las funciones del corazón, de los pulmones o de ambos órganos al mismo tiempo. Así, el trabajo ganador valora los cuidados de enfermería en estos pacientes, que deben pivotar en torno a tres pilares básicos de atención: las infecciones, el sangrado y el disconfort.
Segun explica Sheila Senra "trátase de pacientes críticos de gran complexidade, e cunhas determinadas características, con cánulas de acceso femoral venoso e arterial, polo que presentan maior risco de infección e un maior risco de sangrado. Ademais, tamén constamos un maior disconfort, polo que é fundamental prestarlle un especial coidado ao seu nivel de dor e ansiedade, sendo moi importante o seu benestar emocional e o apoio familiar durante o tratamento".
Importancia del trabajo de enfermería
Esta terapia con ECMO consiste en la extracción de la sangre del paciente, para hacerla pasar por una máquina que la oxigena, y posteriormente retornarla al sistema circulatorio. La sangre se extrae a través de una cánula conectada a la vena femoral, en la ingle, y vuelta al cuerpo por otra cánula introducida en la vena yugular del cuello o en la arteria femoral.
Así, toda la sangre del cuerpo humano, unos cinco litros, circula en un minuto a través de este circuito externo. El objetivo es que el pulmón y el corazón se recuperen de sus lesiones mientras la máquina realiza alguna de sus funciones. Esto es, la máquina en sí misma no cura, pero posibilita sustituir la función de los órganos mientras se recuperan o se trata la enfermedad causal.
Se trata de una técnica que tiene unas indicaciones muy concretas, para pacientes con enfermedad respiratoria o cardíaca grave, o en parada cardíaca, cuando el resto de las terapias convencionales han fracasado. Es una técnica muy especializada y que requiere de un trabajo multidisciplinar, siendo la labor de enfermería fundamental en la prestación de los cuidados a estos pacientes.